La firma deportiva Adidas anuncia la venta de su filial Reebok. El grupo estadounidense Authentic Brands Group (ABG) se queda con ella por 2100 millones de euros.
Adidas firma un acuerdo sin grandes beneficios
La empresa alemana ha anunciado esta semana que la operación culminará totalmente en el primer trimestre de 2022. La mayor parte se pagará en efectivo.
“Adidas anuncia que ha alcanzado un acuerdo definitivo para vender Reebok a Authentic Brands Group por un precio total de 2.100 millones de euros. La mayoría se pagarán en efectivo al cierre de la operación”, señala el comunicado que la empresa emitió el pasado jueves.
La transacción está sujeta a las “condiciones habituales” de competencia. “Adidas tiene intención de compartir la mayor parte del efectivo que reciba de la operación con sus accionistas”, añaden desde la empresa alemana, anticipando así un empujón al dividendo.
La venta de Reebok no supone un gran beneficio para la multinacional alemana. Esta firma pagó alrededor de 3100 millones de euros por ella en 2006. Su intención era ganar tamaño y competir así con su rival Nike.
No obstante, su escaso rendimiento hizo que los inversores pidieran en numerosas ocasiones que se rompiera con la marca americana. Su mal desempeño desencadenó llamamientos reiterados por parte de los analistas a que la firma fuese vendida lo antes posible para poner así fin a sus problemas.
Mientras tanto, la empresa deportiva alemana ganaba posiciones y cuota frente a su rival, ayudada por las alianzas con rostros conocidos como Kanye West, Beyoncé y Pharrell Williams.
Le estarán agradecidos siempre
“Reebok ha sido una parte valiosa de Adidas", subraya en el comunicado Kasper Rorsted, consejero delegado de la firma alemana.
"Estamos agradecidos por las contribuciones que la marca y su equipo han hecho a nuestra compañía”, añade en la nota informativa Rorsted.
Además, vaticina que a la firma estadounidense le irá bien en esta nueva etapa. “Creemos que la marca Reebok estará bien posicionada para el éxito a largo plazo», señala el CEO de la multinacional alemana.
En cuanto a la firma alemana, se concentrarán todos los esfuerzos en ejecutar la estrategia de 'poseer el juego'. Esto "nos permitirá crecer en una industria atractiva, ganar participación de mercado y crear valor sostenible para todos nuestros accionistas", añade Rorsted.
Por su parte, Jamie Salter, fundador y presidente ejecutivo de ABG señala que “es un honor recibir el encargo de continuar el legado de Reebok”. Además, asegura que su intención es “preservar la integridad, innovación y valores de Reebok”, incluyendo así su cartera de tiendas físicas.
“Hemos tenido la mirada puesta en Reebok durante muchos años, y estamos emocionados por finalmente traer esta icónica marca”, añade Jamie Salter.
Una estrategia para el futuro
Fue en febrero de este año cuando la multinacional alemana anunció su intención de vender la marca estadounidense. Esto formaba parte de su estrategia para el próximo lustro. De hecho, su plan “Own the game”, adueñarse del partido, supone centrar los esfuerzos en la marca principal.
Además, Reebok nunca dio los resultados esperados. A pesar de su plan de fortalecimiento de 2016, llamado “Muscle Up”, musculación, no logró lo que quería. De hecho, esto solo la devolvió a la rentabilidad, sin más.
Con la llegada de la crisis sanitaria del COVID-19, a comienzos de 2020, las dificultades de Reebok se acentuaron. De hecho, en febrero de este año, fuentes del mercado aseguraban que el negocio de la firma estadounidense podría valer unos 1000 millones de euros.
Según Adidas, la venta de esta filial estadounidense no tendrá impacto en las perspectivas financieras de este año ni en sus objetivos económicos de la estrategia hasta 2025.