Al contrario de lo que le sucede a la mayoría de personas, durante el confinamiento también hay quién ha aprovechado para adelgazar. Una chica de 20 años, que pesaba 109 kilos ha conseguido bajar 40 hasta llegar a los 65 kilos.
Mientras mucha gente aprovechaba para preparar dulces o comidas muy copiosas, la británica Trinity Willis decidió encauzar su vida al deporte, concretamente a la danza. La joven no dudó en aprovechar el confinamiento para comenzar a bailar sus canciones favoritas.
Con un horario marcado por ella misma, la joven logró adelgazar 44 kilos durante el encierro. «Estoy muy orgullosa de lo lejos que he llegado y definitivamente voy a seguir bailando», asegura la Willis, que también reconoció que «había alcanzado un peso aterrador en una edad muy temprana. Odiaba cualquier forma de ejercicio, pero seguía comiendo emocionalmente. Comía un montón de chocolate, galletas y pasteles. Recuerdo que me despertaba antes que nadie y devoraba todo un brazo de gitano de chocolate para desayunar».
Sin duda, se trata de un ejemplo de superación que ella misma ha querido dar a conocer a través de diversos medios británicos como 'The Sun'. Entre otras cosas, la joven reveló que desde pequeña su relación con la comida siempre había sido nefasta. «Siempre había sido la niña más grande de mi clase. A medida que crecía lo era más. Me conocían como 'la gorda' y solía engordar unos 6 kilos al año».
«Empecé a sufrir dolor en las articulaciones de mis rodillas debido a mi peso, lo que me hizo volverme más perezosa. Me costaba mantenerme al día en educación física o correr tan rápido como mis amigos. Fue vergonzoso», confesaba la joven.
«Un simple paseo me dejaba sin aliento, haciéndome evitar cualquier forma de ejercicio. Cuanto menos hacía, más aceptaba que no iba a cambiar cómo era», añadía. Sin duda, el confinamiento, unido a la música de Beyoncé y Bruno Mars, han hecho que esta joven fuese capaz de dejar atrás su sobrepeso.