Las elecciones podrían estar muy cerca en España. Desde la dirección nacional del Partido Popular aumentan los partidarios de adelantarlas en Andalucía al próximo otoño, una situación que podría afectar a todo el país.
El adelanto, otro varapalo para Sánchez
La intención con este anticipo de los comicios andaluces es asestar un gran golpe a Pedro Sánchez tras el 4M en Madrid. Además, el objetivo también es evitar una nueva traición de los de Inés Arrimadas como la que ocurrió en Murcia hace tan solo unos meses.
Se quiere impedir a toda costa que el líder del momento allí, Juan Espadas, tenga tiempo para afianzar su liderazgo en el PSOE y también a nivel regional.
Según publica Confidencial Digital, el principal peligro para Juanma Moreno (PP) es la posibilidad de una ruptura en la formación naranja en el Parlamento andaluz.
De los 21 diputados que forman el partido naranja, Juan Marín, alrededor de la mitad son críticos con su gestión. En el caso de que cuatro de ellos decidieran marcharse al grupo de los no adscritos, el Ejecutivo de coalición se quedaría con minoría parlamentaria.
Lo cierto es que Martín ha hecho varios cambios internos que no han sido del agrado de todos en las últimas semanas. De hecho, sustituyó a Sergio Ramos, portavoz, y a Fran Carrillo, portavoz adjunto.
“Juan Marín no es capaz ahora mismo de controlar a sus propios diputados. Eso es una amenaza seria para la estabilidad del Gobierno, pese a que él dé unas garantías a Juanma que no puede asegurar en este momento”, recoge Confidencial Digital.
“Algo se está moviendo en Ciudadanos y, especialmente, en C’s Andalucía, y esos movimientos van girando todos hacia la izquierda”, advierte la misma fuente.
Las elecciones perjudicarían mucho a la izquierda
La ruptura de la coalición en Granada ha supuesto que en el equipo de Pablo Casado defiendan un adelanto electoral en Andalucía. Desde este partido ven un acercamiento peligroso entre la formación naranja y el PSOE.
La dirección nacional del PP ha trasladado al presidente de la Junta que no hay problemas para el adelanto. No obstante, se ha subrayado la ‘costumbre’ política de no convocar elecciones cuando un partido va a celebrar su Congreso.
Está previsto que el próximo mes de octubre el PSOE lo haga. Por ello, desde el PP andaluz se podría promover la convocatoria para los meses de noviembre o diciembre.
Desde la presidencia andaluza se ha pedido una justificación buena para fundamentar este adelanto electoral. Y es que la negativa de Vox a apoyar la aprobación de la Ley del Suelo presentada por la derecha, no le parece argumento suficiente.
Los colaboradores de Juanma Moreno consideran oportuno aprovechar este momento. Para ellos, Sánchez no tiene un proyecto claro para España y el PSOE tampoco para Andalucía.
Es la ocasión perfecta para hacerle daño una segunda vez al Ejecutivo tras la victoria del PP en Madrid. Isabel Díaz Ayuso salió vencedora con el 44,72% de los votos.
En la dirección nacional del PP destacan que el último sondeo del Centro de Estudios Andaluces (CENTRA) se situarían a tres escaños de la mayoría absoluta. Con un 37,9% de los votos, los populares lograrían entre 48 y 52 de los escaños, mientras que la mayoría absoluta son 55.
El partido de Sánchez caería 4 puntos y medio porcentuales teniendo en cuenta las de diciembre de 2018.
Al partido naranja tampoco le iría demasiado bien. Sus 21 diputados pasarían hasta a ser menos de la mitad
En el lado contrario estaría Vox, que incluso podría ganar un diputado, sobre los 12 que mantiene en la actualidad.
Unidas Podemos, que en las anteriores elecciones se presentó en coalición con Adelante Andalucía, conseguiría 9 o 10 diputados. El partido de Teresa Rodríguez, una vez producida la ruptura con Podemos, se quedaría con un 3,6% del voto. Esto podría suponer no tener ningún diputado o como mucho dos.
De confirmarse estos resultados, el Ejecutivo español podría tomar una drástica decisión y adelantar los comicios a nivel nacional también.