La violencia de género se suele asociar con el asesinato de una mujer a manos de su pareja o su ex pareja. Solo el año pasado, 45 mujeres fueron asesinadas en nuestro país. Pero la realidad es que no tiene que ser por qué ser siempre así, en ocasiones no consiguen dar con su víctima y acaba sucediendo que acaban atacando y acabando con la vida de alguien de su entorno familiar. Y esto lo que podría en una localidad de Almería.
Ha sido concretamente en Roquetas de Mar donde la Guardia Civil ha detenido en las últimas horas a un hombre que habría matado al tío de su excompañera sentimental y habría herido de gravedad también a la madre de esta. El arrestado les habría atacado a los dos con un arma blanca, causándole heridas mortales al hombre.
Así lo anunciaba en un comunicado este lunes la Comandancia de Almería. La benemérita informaba que los hechos habrían tenido lugar en la localidad de El Parador de las Hortichuelas, perteneciente al municipio de la costa almeriense. El suceso habría sucedido este domingo por la tarde, informaban las mismas fuentes de la Guardia Civil.
Según parece, el autor de los hechos habría accedido a la vivienda donde residían el fallecido y la mujer herida por «motivos desconocidos». Fue una vez dentro del domicilio, cuando se produjo el ataque con arma blanca a los dos familiares de su expareja. Se desconoce si las víctimas eran el objetivo del atacante o si realmente a quien buscaba era a su antigua compañera.
El tío de la expareja del atacante, de 72 años, acabó perdiendo la vida a causa de las puñaladas recibidas por un arma no especificada. Con esa misma habría atacado también a la que fuera su suegra, de 68 años, que tuvo que ser hospitalizada en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), del Hospital de Poniente de El Ejido, también en la provincia de Almería, a la que fue trasladada de urgencia. La mujer permanecería ingresada en este mismo centro hospitalario, aunque se desconoce cuál es la evolución de sus heridas.
Contaba con números antecedentes por violencia de género
Los agentes de la Guardia Civil fueron avisados de la agresión minutos después que esta se produjera. Pudieron comprobar el antiguo vínculo que unía al atacante con las dos personas que fueron atacadas con el arma blanca, ambas de nacionalidad española.
Con esta información, rápidamente confirmaron que el autor de la agresión contaba con numerosos antecedentes por violencia de género. Es más, este llevaría puesta una pulsera del centro de control 'Cometa', aquellas que son utilizadas para saber el paradero de aquellos acusados de malos tratos y que tienen una orden de alejamiento dictada por un juez.
Este dispositivo acabó resultando clave para su rápida detección. Y es que la Guardia Civil tardó «apenas 20 minutos» en localizar el punto exacto donde se encontraba, según apuntan fuentes policiales a Europa Press. Este pudo ser detenido poco después de la agresión en un club de alterne donde se había dirigido tras la agresión.
Una vez fue localizado en el prostíbulo, fue acusado de dos delitos, uno de homicidio y otro por homicidio en grado de tentativa, por el apuñalamiento de la madre de su ex. El caso todavía está siendo investigado, una vez el juez no ha decretado el secreto de sumario.
Aunque todo pueda apuntar a un intento de acabar con la vida de su ex pareja fallido o de hacerle daño con la muerte de sus seres queridos, existen indicios que podrían indiciar otra motivación añadida a los «vínculos afectivos» y que todavía está «por determinar».