La Policía Nacional necesitó unas arduas y largas semanas de investigación, pero finalmente pudo resolver un caso de asesinato en el que venían centrando buena parte de sus esfuerzos. Se confirmaba la detención de un hombre de 45 años, de nacionalidad española, acusado de haber acabado con la vida de su pareja en una pensión de Valladolid el pasado mes de febrero. El cuerpo de la mujer no fue localizado hasta 17 días después, cuando la propietaria del establecimiento decidió entrar a la habitación al no ver movimientos de ninguno de los dos huéspedes.
El cuerpo de la víctima, chilena de 41 años, habría permanecido esas más de dos semanas sin que nadie se preocupará por ella o que levantará sospechas un posible olor. El presunto autor del crimen pudo ser detenido hace escasos días, según informaba la policía el pasado viernes, después de que haya estado escondiéndose durante semanas por varias ciudades del norte de España.
Todo habría empezado el pasado 28 de enero, habría sido entonces cuando el hombre y la mujer se habrían registrado en la céntrica pensión Vianesa de Valladolid, según recoge el diario 'El País'. La propietaria, Manuela Rodríguez, explica que le pagaron por adelantado 15 días pero que pasó este plazo y empezaron a adeudarle dinero. No fue hasta el 21 de febrero que la mujer decidió ver que pasaba, viendo que ninguno de los dos daba señales de vida.
La dueña de esta pensión durante los últimos 40 años decidió entrar con su propia llave en la habitación para ver que pasaba. Allí se encontró con la cama hecha y con un bulto pero con las ventanas entreabiertas. Fue cuando se dispuso a levantar las mantas de la cama, cuando localizó el cuerpo sin vida de la mujer.
Asustada salió de la habitación corriendo y fue rápidamente a dar alerta a la policía. Un grupo de agentes no tardó en desplazarse hasta el lugar de los hechos. Sus primeras inspecciones, ya les permitieron llegar a la conclusión de que se trataba de una muerta violenta. Es por eso que recabaron toda la información posible entre la víctima y el que parecía con toda posibilidad que era su asesino.
El hombre, J.A.S., huyo del lugar de los hechos sin aparentemente dejar rastro. La dueña de la pensión, de 10 habitaciones, explica que el establecimiento suele acoger a clientes de larga estancia y que por eso no le sorprende no ver con asiduidad a algunos de ellos. En el caso de esta pareja, aseguraba que el hombre tenía una copia de las llaves de la habitación y que entraba y salía, mientras su mujer se quedaba en cama por qué estaba enferma.
Las diferentes investigaciones policiales permitieron confirmar que el hombre estuvo vagando por varias ciudades del norte de España. Por lo menos habría estado en Vitoria, Pamplona y Tudela, donde finalmente fue detenido el 22 de abril. El día 24 fue puesto a disposición judicial ante Juzgado de Instrucción 5 de Valladolid, el que estaba de guardia, que se inhibió ante un juzgado de Violencia contra la mujer al confirmarse el vínculo sentimental entre víctima y presunto asesino. El juez decretó su ingresó en prisión.
Sería la novena víctima de violencia de género en España este 2021
Todo apunta a que esta mujer de 41 años será considerada la novena víctima de violencia machista en lo que va de año en España, la número 1.087 desde que empezó el registro en 2003. Esta, según explica la concejala de Servicios Sociales de Valladolid, Rafaela Romero, había sido usuaria de un albergue municipal en enero, pero llegó un momento en que no supieron nada más de ella. «No quería seguimiento de Cruz Roja ni del Ayuntamiento. No sabíamos nada más, desapareció del mapa», afirma.