Toñi Moreno ha vuelto a presentar 'Viva la vida', sustituyendo a Emma García durante las vacaciones, y ha vivido un momento tenso con Makoke. Esta, que ejerce como colaboradora del programa, ha dado plantón al mismo y no ha acudido a su cita del sábado. ¿El motivo? Que se encuentra muy enfadada por lo que se ha desvelado en dicho espacio de Telecinco.
En concreto, la malagueña, que sigue en conflicto con su ex (Kiko Matamoros), está molesta por lo que se ha hablado de su nueva relación.
Makoke no acude al plató
Ayer sábado, la colaboradora tenía que acudir a 'Viva la vida'. Sin embargo, nada más comenzar el espacio Toñi Moreno daba a conocer que la silla que esa ocupa estaba vacía. ¿El motivo? Que aquella estaba dolida porque se hubiera sacado a la luz su nueva 'ilusión' así como porque se hubiera enviado reporteros a seguirla a Ibiza.
En concreto, así lo exponía en una conversación telefónica que había mantenido con los redactores: «Me habéis hecho mucho daño. ¿Con qué cara me presento yo ahora en un plató en el que se me ha traicionado?». Y es que también reconocía que no le había gustado que el programa emitiese unos mensajes de WhatsApp que se había intercambiado con su chico. Mensajes privados que habían tenido lugar durante uno de los programas anteriores.
Ante todo lo sucedido, Makoke no dudó en exponer que se planteaba seguir trabajando como colaboradora en ese espacio: «Tengo que trabajar, claro que sí, pero no a cualquier precio».
Llega la concesión
Los reporteros de 'Viva la vida' se dirigieron ayer hasta la casa de la colaboradora en Madrid. Y esta no dudó en salir a atenderles y así fue como explicó a Toñi Moreno cómo se sentía. En concreto, comenzó lanzándoles una gran reproche: «Me hicisteis sentir como si estuviera desnuda en plena calle».
Asimismo, reconoció que el director del programa, Raúl Prieto, le había llamado varias veces para pedirle disculpas. No obstante, manifestó que necesitaba tiempo para olvidar lo que había sucedido: «Que yo venda mi vida no significa que no pueda tener privacidad».
En ese punto, parecía que la reconciliación entre ambas partes era imposible. Sin embargo, finalmente la presentadora convenció a Makoke para que se subiera al coche que le iba a mandar producción y acudiera al trabajo. Eso sí, una vez en el plató no se volvió a hacer mención a lo sucedido y no se le preguntó a la malagueña por su novio. Novio del que se sabe que tiene unos cincuenta años y que ha estado con ella en Ibiza.
Los espectadores del programa, a través de la cuenta de Twitter de este, no dudaron en comentar lo sucedido. Y la mayoría se mostraban en contra de la actitud de la colaboradora. Así, lo dejaron patente con mensajes tales como «Vive de lo que vende y se ofende que la pillen con uno».