Lara Álvarez se rompió de dolor al escuchar la desgarradora historia de Elena Rodríguez en 'El puente de las emociones'. La superviviente había dejado entrever en anteriores ocasiones que tiene mucha falta de confianza debido a una infancia complicada. Pero ha sido en 'Supervivientes: Tierra de nadie' donde Elena ha contado, por primera vez, qué sucedió.
La superviviente empezó a llorar nada más subirse a este ‘puente’. Tras el ánimo de Lara Álvarez recordándole que era una gran superviviente al haber llegado tan lejos, Elena daba un testimonio sobrecogedor sobre su infancia.
«Érase una vez una niña que tenía una familia maravillosa, de cinco hermanos, un papá y una mamá. Pero esta niña tenía un defecto: no sabía enfrentarse, era disléxica y tenía falta de concentración. Su madre no lo entendía y pensaba que se portaba mal. Su mamá usaba la correa para intentar que esa niña hiciera las cosas bien», comenzaba.
«No sé si hay culpables porque cuando no se entiende lo que pasa o piensas que esa es la forma de educar correcta, no hay culpables. Es verdad que llevo mucho dolor, pero amo a mi madre más que a mí misma», aseguraba rota al revivir el pasado.
Además, la madre de Adara también explicaba lo que su infancia le había provocado en su vida: «Cada correazo que me daba hacía que yo me hiciera más pequeña. Hacía que yo dejara de existir y que hubiera un monstruo que me atormentara diciendo que no iba a ser capaz de hacer ni decir nada».
«Es muy duro lo que has contado», afirmaba Lara entre lágrimas
«La culpa va por mis hijos. La culpable de meter mierda en cada ocasión fui yo. Fui culpable por no darme cuenta antes de lo que pasaba. Nunca he hablado con esto con vosotros pero hay cosas que yo no tenía que haber permitido y como madre soy culpable», le confesaba indirectamente a sus hijos, Adara y Aitor.
Al escuchar el relato de Elena, Lara Álvarez no pudo evitar las lágrimas tras oir de cerca esta dura confesión. La presentadora no tardó en cruzar el puente para darle un fuerte abrazo a la superviviente. «Es muy duro lo que has contado. Yo no tenía ni idea», le decía Lara embargada por la emoción.