El ansiado testimonio de Rocío Carrasco ha generado un revuelo mediático sin precedentes. Más de cinco millones de personas conectan semanalmente con 'Contar la verdad para seguir viva'. La intención de los espectadores es muy variada: unos quieren seguir aplaudiendo las palabras de la protagonista, y otros están deseando encontrar algún error en su discurso.
La periodista Paloma García-Pelayo ha demostrado que se puede pertenecer a los dos grupos. Su dilatada carrera profesional le legitima para hacer ciertos juicios. Todas sus opiniones tienen una gran relevancia. Por ese motivo, muchos medios de comunicación se han hecho eco del último artículo que ha escrito en 'Look'.
La experta en el clan Jurado ha identificado los dos «fallos de más bulto» que ha cometido Rociíto. Tiene información suficiente para reconocer que está siendo sincera. Pero, asegura que no está exenta de responsabilidad. Algunas de sus decisiones han sido nefastas: ella misma le ha dado fuerza a su verdugo.
El polémico documental está a punto de llagar a su fin. Telecinco emitirá esta noche el capítulo número once, y promete ser uno de los más especiales. Rociíto regresará a plató para seguir aclarando las dudas de la audiencia. Quizá, aproveché para justificar sus malas decisiones.
El primer error: «elegir al hombre equivocado»
Paloma García-Pelayo recuerda como definió Rocío Jurado a su exyerno. En un programa de la televisión argentina, la artista aseguró que le había dado «mala vida» a su hija. Carrasco apostó por él, y no renunció a su compañía hasta 1999. Jamás ha podido demostrar las acusaciones de su progenitora, pero cada vez hay más gente que confía en sus palabras.
Antonio David Flores ha mentido. Lo primero que hizo para lavar su imagen es filtrar a la prensa los detalles del proceso judicial que estaba atravesando. No dio información exacta. Aportó datos sesgados que convertían a su exmujer en una auténtica villana.
Muchos periodistas aprovecharon el tirón para cobrarse viejas venganzas. Aunque, Paloma García-Pelayo siempre ha tenido muy claro quien estaba mintiendo:
«La juez de Violencia de Género sí encontró indicios suficientes para juzgarle por maltrato. El Fiscal, no. Nunca ha habido juicio. Nunca le han tomado declaración en sala, nunca han hablado los testigos, ni tampoco el denunciado. No ha sido absuelto, pero tampoco juzgado».
En 2019, la batalla judicial de Rociíto y su exmarido dio un giro de 180 grados. La hija de la Más Grande estuvo a punto de quitarse la vida, e intentó que la justicia considerara este episodio como una prueba determinante. Sin embargo, una vez más, los jueces le dieron la espalda.
El segundo error: compartir la custodia de los niños
Rocío Carrasco ha vivido un auténtico infierno. Antes de separarse, Antonio David le hizo una promesa: «te vas a cagar. Voy a quitarte a los niños». Usó como espada a personas que no tenían nada que ver en el asunto, e implicó a muchos familiares. Aunque, lo más cruel, es que también utilizó a sus hijos.
'Contar la verdad para seguir viva' ha aclarado a un gran misterio. La obsesión del exguardia civil por hacerse con la custodia estaba motivada por intereses económicos. Pedía 3.000 euros por cada pequeño, 1.500 para él, y vivir en la mansión que la Jurado tenía a las afueras de Madrid.
Rociíto pensó que, si accedía a que sus hijos pasarán quince días al mes con su padre, todo terminaría. Pero, se equivocaba. «El segundo gran erro de su vida fue compartir ese derecho. Hoy, no puede estar más arrepentida», sentencia Paloma García-Pelayo en 'Look'.
La periodista ha recordado el episodio más tormentoso de la vida de Carrasco: los malos tratos. «Flores no se preocupó de respetarla. Se dedicó a agredirle verbalmente, a hacerle luz de gas, aislarla. E incluso, agredirle físicamente, amén de engañarle con otras mujeres», escribe. ¿Estará de acuerdo Rocío con los errores que ha identificado la experta?