El capítulo ocho de 'Contar la verdad para seguir viva', ha marcado un antes y un después en el testimonio de Rocío Carrasco. Hasta hace muy poco tiempo, gran parte del público no entendía por qué decidió separarse de su hija. Le condenaron por dicha decisión, y la acusaron de mala madre.
Sin embargo, Telecinco ha conseguido darle la vuelta a la historia. Al parecer, Rocío Flores se ha aprovechado, durante ocho años, del silencio de su progenitora. El 27 de julio de 2012, la nieta de la Jurado fue protagonista de un episodio violento e intolerable.
Rociíto se niega a dar ciertos detalles. Pero, hay muchos periodistas que conocen cómo sucedieron los hechos. Según cuentan, la joven, influenciada por su padre, le propinó un golpe a Carrasco que logró dejarle inconsciente durante unos minutos. Después de la agresión, descolgó el teléfono y llamó a Antonio David Flores. «Ya está hecho», le dijo.
El exyerno de la Jurado convenció a su hija para que denunciara a Rocío. Fueron a comisaría, e interpusieron una demanda por malos tratos. Sin embargo, el juez desestimó esta causa, y culpó a la niña de haber estado acosando a su madre de forma continuada.
La justicia separó a Carrasco de su hija, y Antonio David aprovechó para filtrar a la prensa un rumor que no se correspondía con la realidad. Rocío Flores sabía que su padre estaba mintiendo, pero jamás dio la cara por su progenitora.
«Yo he escuchado a Rocío Flores hablar mal de su madre», asegura Jorge Javier. Estas palabras han causado un gran revuelo.
Nadie entiende cómo la influencer ha podido engañar al público de una forma tan sibilina. Delante de las cámaras siempre ha mantenido un perfil bajo. Aunque, sus compañeros de plató, aseguran que, cuando se apagan los focos, su discurso es completamente diferente.
Ana Rosa Quintana siempre se ha mostrado muy cercana con ella. «Yo sí te creo», le dijo en una ocasión. La veterana presentadora pensó que la joven era una víctima de la batalla de sus padres. No obstante, después de emitirse el octavo episodio de la polémica docuserie, podría haber cambiado de opinión.
¿Continuará trabajando la nieta de la Jurado con Ana Rosa Quintana?
Las redes sociales exigen que, los rostros conocidos que han apoyado a Rocío Flores, den un paso al frente. Consideran que la influencer es culpable de un delito muy grave. Así que, debería recibir el mismo castigo que su padre: el exilio mediático.
«Tolerancia cero», escribe un usuario de Instagram. Según la opinión de mucha gente, cuando la hija de Antonio David agredió a Rocío, tenía edad suficiente para ser consciente de lo que hacía.
Kiko Hernández se ha sumado a esta corriente, y pide que la joven de ciertas explicaciones. «A mí me ha desencantado», comenta en un tono muy tajante.
No sería de extrañar que Telecinco tomara medidas contra Rocío Flores. Parece que Rociíto ha llegado para quedarse y, cualquier persona que pueda suponer un obstáculo para su trayectoria mediática, será fulminantemente eliminada.
Mientras tanto, Carrasco ruega que nadie le haga daño a su pequeña. «Ha sido verdugo porque antes fue víctima», explicó en su ansiada entrevista. Pero, sus defensores no han tenido en cuenta esta petición. Piensan que, para terminar de hacer justicia, la nieta de la Jurado debe abandonar su trabajo en la pequeña pantalla.
«No sé puede defender el testimonio tan desgarrador de Rocío Carrasco, y a la vez tener en plantilla a su hija, habiendo informes médicos y judiciales que demuestran el maltrato», escribe un internauta en su cuenta de Twitter.
Gran parte de la audiencia ha amenazado a Ana Rosa Quintana con no consumir su programa si sigue trabajando con Rocío Flores. ¿Tendrá en cuenta estas advertencias?