Alba Carrillo reaparece con nueva imagen. La ex de Feliciano López se ha hecho algunos retoques estéticos estos últimos días.
El domingo Alba Carrillo acudió al plató de ‘A propósito de Supervivientes’ como colaboradora. La ex de Fonsi Nieto lo hizo con una imagen perfecta y elegante como siempre. Sin embargo, algunos usuarios de las redes sociales se fijaron especialmente en la colaboradora. Su cara lucía unos pómulos sobresalientes y no había rastro alguno de arrugas en su piel. Esta imagen contrasta con la que ofrecía la hija de Lucía Pariente meses atrás.
Desde el punto de vista de la Clínica Lola Sopeña Medicina y Cirugía Estética confirman que Alba Carrillo habría modificado su apariencia.«A pesar de tener un hermoso rostro siempre, ha pecado de tenerlo ligeramente alargado, algo que junto con su amplia frente le restaba belleza», han señalado los expertos.
La joven se habría hecho una remodelación sin pasar por quirófano, eliminando así la forma puntiaguda original de su óvalo facial. Esto se consigue a través de la infiltración de hidroxiapatita cálcica, lo que rondaría los 800 euros.
Para completar esta mejora, la colaboradora se habría infiltrado ácido hialurónico en los pómulos, unos 300 euros, y se habría realizado un botox, alrededor de 320 euros. No sería la primera vez que la ex de Feliciano López se hace este último retoque, ya que suele pasar por ello de forma periódica.
Además, podría haberse aplicado un vitaplasma de 220 euros para nutrir e hidratar la piel de su rostro. Así conseguiría ese aspecto juvenil y luminoso que le caracteriza.
No es la primera vez que acude a una clínica estética
Alba Carillo se sometió en julio del año pasado a un tratamiento de belleza para retocar su cuerpo. Su objetivo no era otro que elevar sus glúteos como habían hecho ya otras ‘celebrities’.
«Estoy muy contenta con mi físico, pero este tratamiento para elevar la zona trasera sí me resulta atractivo», explicó la hija de Lucía Pariente en su momento.
Para llevar a cabo esta tarea sólo necesitó una sesión anual de radiofrecuencia ‘Thermage’. Una técnica estética que no utiliza cirugía y que no produce dolor. Lo que si requiere es tener el bolsillo lleno. Y es que la broma asciende a casi dos mil euros.