Paula Badosa, la ex novia de David Broncano de 'La Resistencia', se encuentra totalmente aislada en una habitación del hotel Grand Hyatt, en Maelbourne. La joven deportista se encuentra realizando una cuarentena de 14 días después de que un entrenador que viajaba en su vuelo desde Abu Dabi diese positivo en Coronavirus.
A pesar de que la tenista ha aplaudido las medidas del gobierno australiano, asegura que no ha tenido ningún tipo de contacto con el entrenador, ya que no estaba en la misma sección que él en el avión.
La propia organización, anunciaba que en ese avión viajaban 64 personas, 23 de ellos jugadores, y que actualmente todos ellos se encuentran en sus hoteles realizando la cuarentena.
La joven relata como fueron los hechos
Mediante una entrevista a través de la plataforma Zoom y desde su habitación de hotel, Paula Badosa ha relatado a la revista 'AS' como se había enterado de todo lo que estaba ocurriendo.
«Nos mandaron un email diciendo que una persona de nuestro vuelo había dado positivo. Nos había dicho en un principio que el control era por secciones y que si alguien de la nuestra daba positivo tendríamos que entrar en cuarentena estricta.
En la mía tuvimos mucho cuidado, yo iba con la persona que iba a entrenar conmigo (Marta Kostyuk), nos hicimos test en Abu Dabi y lo teníamos controlado», comenzaba diciendo la joven.
Sin embargo, Badosa ha denunciado que en el último momento el gobierno australiano decidió cambiar las normas en los vuelos haciendo que esta tuviese que realizar la cuarentena.
«De un día para otro han cambiado la norma y la han hecho extensible a todo el vuelo. Eso es de lo que me quejo, las medidas las entiendo y por eso es un país que no tiene fallecimientos, pero no se pueden cambiar las reglas de un día para otro sin avisar. En el papeleo no ponía nada de eso. Es bastante jodido», sentenciaba la joven visiblemente molesta.
La joven, que lleva dos meses de pretemporada, ha denunciado que no tienen absolutamente nada para entrenar y que no pueden estar 20 días (lo que dura la cuarentena) sin entrenar.
«Hemos pedido material para ejercitarnos y estamos a la espera de que nos den algo, pero tampoco hay espacio en la habitación. La mía es muy pequeña y no se puede abrir la ventana. Si abro la puerta de la habitación me pueden sancionar, sólo puedo hacerlo cuando me traigan la comida», confesaba.
A falta de dos semanas para jugar la WTA 500, por el momento el organismo aún no ha intervenido a favor de las deportistas que se han visto afectadas por esta medida. Por el momento, y ante la falta de soluciones, la joven asegura estar «en shock y no sé cómo preparar el día a día. Me darán instrucciones para ejercitarme, pero poco más».
Y es que perder 14 días supone todo un drama para un deportista de élite. «Puedo perder más de la mitad de mi rendimiento actual. La fuerza, cardio... una barbaridad en un deporte de élite en el que todo va al milímetro y antes de un Grand Slam, que es el torneo más importante para los tenistas», relataba.
Finalmente, la joven relataba para la conocida revista deportiva que actualmente tanto ella como su compañera Kostyuk «estamos hablando mucho para buscar soluciones porque nos parece injusto que se cambiaran las normas.
Estando jodida y enfada, reconozco que me parece bien que el Gobierno australiano haga estas restricciones tan duras, pero repito que no se pueden cambiar las cosas de un día para otro».