El reconocido actor asturiano se encontraba ingresado desde hace algunos días por una «indisposición», tal y como comentaba su mujer, Carmen Quesada, ayer mismo cuando el programa de Telemadrid, 'Aquí hay madroño' se ponía en contacto con ella para conocer los detalles de este ingreso.
Era la tercera vez que Arturo Fernández tenía que permanecer ingresado en los últimos meses. Como resultado de dichos ingresos, en el mes de abril se anunciaba que la obra 'Alta Seducción' quedaba suspendida debido a que el actor estaba sufriendo problemas estomacales, a lo que se le unió más tarde una caída aparatosa que le provocó la rotura de una pierna.
Consideraba que solo el público podría jubilarle
El eterno galán de los escenarios no estaba dispuesto a jubilarse, a pesar de que en el mes de febrero ya había cumplido los 90 años de edad. Prefería reencontrarse con su público en cada función, pues él consideraba que tan solo el público podría jubilarle, y hasta el momento, eso no había sucedido.
De esta manera, Arturo Fernández fallece habiendo dedicado 70 años de su vida al mundo de la interpretación y siendo un referente en el mundo de la actuación, además de ser muy querido por el público, haciéndose especialmente conocido a partir de su participación en televisión a través de series como 'La casa de los líos' o ' Como el perro y el gato'.
Aun así, el teatro fue su gran pasión, dedicando todos sus esfuerzos, también los económicos, a la dirección y producción de sus obras. Con respecto a su vida personal, aunque presumía de gustarle en demasía las mujeres, desde los 50 años permanecía unido a Carmen Quesada. Arturo Fernández tiene tres hijos, fruto de su primer matrimonio con Isabel Sensat. Además, a sus 90 años, era abuelo de cuatro nietos.