La cuarta entrega de 'The Dancer' ha estado repleta de emoción, talento y muchas lágrimas. En esta ocasión ha sido Miguel Ángel Muñoz el que ha protagonizado una escena de lo más tierna al romperse a llorar en mitad del programa tras ver una de las actuaciones.
El nuevo concurso de danza de TVE sigue reclutando a los mejores bailarines de nuestro país, que acuden al formato para demostrar sus grandes dotes artísticas y, ya de paso, conmover al público con increíbles historias de superación personal.
El actor Miguel Ángel Muñoz, la extriunfita Lola Índigo y el coreógrafo Rafa Méndez son los capitanes de un concurso que les está haciendo llorar a lágrima viva, una muestra de la enorme empatía que tienen los 'coach' con los aspirantes.
Miguel Ángel Muñoz se rompe a llorar en 'The Dancer' y paraliza el programa tras ver una actuación
No es la primera vez que un capitán del programa se rompe al ver una actuación. Sin embargo, en esta ocasión, la emoción ha llegado hasta tal punto que el presentador se ha visto en la obligación de parar el programa durante un par de minutos para ofrecer consuelo a Miguel Ángel Muñoz.
El actor no ha podido contener las lágrimas tras la maravillosa actuación y la emocionante historia de superación que hay detrás del grupo de baile Verdini, que consiguió cruzar la puerta de cristal en la última entrega del programa.
Se trata de una compañía muy especial y revolucionaria llamada Verdini Dantza Taldea, que tiene como objetivo visibilizar el Síndrome de Down en la danza. Ellos han sido la primera escuela de danza para personas que padecen este trastorno genético y han tenido que luchar para ser reconocidos como bailarines y no como personas que realizan una «actividad de bienestar social».
«No se pensaba nadie que una compañía que tengo yo ahora con 15 personas con síndrome de Down iban a subirse a un escenario para bailar, las cosas ahora han cambiado, pero hace 26 años no estaban como ahora», expresaba la fundadora del grupo de baile.
La escuela Verdini: los jóvenes con Síndrome de Down que conmovieron a Miguel Ángel Muñoz
Bajo las directrices de su directora Isabel Verdini, un grupo de jóvenes con diversidad funcional procedentes desde San Sebastián (País Vasco) han pisado con fuerza el escenario de TVE para enviar al mundo un mensaje muy contundente: «Cualquier persona puede bailar».
La compañía Verdini surge de la valentía, la pasión y la dedicación de Isabel, que le prometió a su sobrina con síndrome de Down enseñarle a bailar como ella lo hace.
Una tarea que ha cumplido con creces, ya que no solo ha ayudado a la hija de su hermana, sino también a un grupo de jóvenes «con una sensibilidad enorme que se entregan a la danza porque les ayuda a canalizar sus sentimientos», señalaba la profesora alabando la dedicación de sus alumnos.
Los halagos tampoco tardaron en llegar por parte de los capitanes del concurso, que se emocionaron al escuchar semejante historia de lucha y superación.
«No me puedo ni imaginar lo completa y lo feliz que te sientes de haber llevado esto adelante. Esto no solo es danza, es amor, es ilusión, y que hayas venido con esta propuesta a demostrar que todo el mundo puede hacer cosas tan bonitas como esta es brutal», le decía Lola Índigo a Isabel.
Sin embargo, la actuación fue especialmente emotiva para Miguel Ángel Muñoz, que no ha podido evitar romperse una vez que los jóvenes se retiraron del escenario.
«¡Madre mía! Me emociono un montón, me ha tocado, no tengo a nadie así, pero me toca», le decía entre lágrimas y con la voz entrecortada al presentador Ion Aramendi, que paralizó el programa para ofrecerle consuelo. «Tienes un corazón muy grande», le decía a su compañero.