Los concursantes de 'Supervivientes' llegaron al programa siendo entre ellos unos grandes desconocidos. Excepto todos aquellos que anteriormente ya se conocían por haber sido pareja o haber protagonizado alguna bronca en el exterior. La expareja de esta edición ha sido Tom Brusse y Melyssa Pinto.
Una pareja más que televisiva que empezó su relación hace unos años en 'Mujeres y hombres y viceversa'. Luego rompieron en 'La isla de las tentaciones' y ahora tratan de convivir como pueden en 'Supervivientes'. Sea como sea, los dos están destinados a seguir viéndose en televisión y por esto tienen que encontrar la forma de lograr la cordialidad.
Cuando llegaron a Honduras los dos jóvenes decidieron olvidar el pasado y apoyarse el uno al otro. Pero esto se ha ido complicando semana tras semana. Tampoco ayudó nada la visita de Sandra Pica y que acabó de incendiar la isla.
Esta venía con la intención de calentar el ambiente, aunque afirmaba que llegaba para dejar a Tom. Lo cierto es que menos ser clara con su novio hizo de todo, hasta acabar haciendo estallar a Melyssa que la supo interpretar. Pinto se dio cuenta rápido que se querían aprovechar de ella.
La joven vio claro que Tom y Sandra intentaban provocarla para despertar el triángulo mediático y que parece que no quieren olvidar. Por este motivo Melyssa fue muy clara y pidió a la pareja que dejasen de meterla en medio de todos los problemas. Asegurando que ella ya había pasado página.
Ahora que Sandra ya ha vuelto a España, Tom y Melyssa han vuelto a hablar entre sí y han solucionado medianamente los problemas. Pinto le ha pedido a su exnovio firmar un acuerdo y que les servirá para llegar hasta el final de 'Supervivientes'. Para hacerlo, le ha pedido a su ex un gran esfuerzo.
Esto no es otro que no le vuelva a hablar en lo que queda del concurso de la que era su novia, Sandra. Y tampoco sacar a relucir problemas del pasado. Melyssa quiere pasar página de verdad y no quiere que su imagen se asocie a este triángulo infernal.
Por su lado, Tom ha aceptado este pacto. Este se hace extensible a cuando el programa acabe. Concretamente se han comprometido a no volver a hablar del triángulo en ningún plató ni tampoco en ninguna revista.
No hay nada más que la palabra para certificar este pacto. Solamente el tiempo lo dirá y las ganas de todas las partes por cumplir con este acuerdo. De momento, hay una parte del triángulo que no ha firmado el pacto y esta es la catalana Sandra Pica.
Reconciliación a la vista
Muchos espectadores del programa ven en esta jugada un primer paso para algo más grande. Algunas mentes pensantes consideran que esto es un paso más para lograr una reconciliación.
Pero no amistosa, parece que podría haber algo más y que quizás Honduras puede ser donde empiece la segunda parte de la relación de los supervivientes. Para ello, aún tienen un mes por delante.
Hay que estar muy atentos a este tipo de jugadas, pues la final cada vez está más cerca. Por este motivo es fácil creer que hay concursantes que ahora podrían idear estrategias. Tanto Tom como Melyssa tienen experiencia en 'realitys' y cualquier movimiento los sitúa en el punto de mira.
Recordemos que los dos han legado a hablar incluso de montar un negocio juntos cuando salgan de la isla. Quedando así unidos de por vida a través de los negocios. Concretamente se ha hablado de una hamburguesería y que estaría pensada para atraer a la gente joven.