Kiko Rivera no está dispuesto a dejarle pasar a su madre los desplantes que le está haciendo y sobre todo, que no esté a su lado cuando más la necesita. El cantante sabe que su madre lo que más odia es que su imagen pública se vea dañada y por esto ha pillado una táctica y no está dispuesto a abandonarla. Sabe que salir en televisión cuestionando a su madre le sirve para poner contra las cuerdas a su matriarca y por esto hoy ha aprovechado la oportunidad que le ha dado 'La casa fuerte', aunque el objetivo inicial no era este.
El 'reality' de Telecinco ha invitado a Kiko Rivera a entrar por teléfono para felicitar a su hermana Isa Pantoja por su veinticinco aniversario, una oportunidad que aunque estaba pensaba para que fuese bonita, ha acabado siendo un auténtico campo de batallas. Rivera ha empezado felicitando a su hermana y haciendo público el gran amor que le procesa, algo que en muchas ocasiones se ha cuestionado por las afirmaciones que ha hecho él sobre ella.
Sabemos que esta relación ahora está mucho mejor y que Isa está siendo uno de los grandes apoyos de Kiko, llegando incluso a prestarle dinero sin necesidad de que se lo devuelva. Volviendo a la llamada, el joven ha seguido hablando con su hermana y lo que ha dicho no ha beneficiado nada a la concursante. Si bien es cierto que Isa le dijo a Jorge Javier el jueves que no quería saber nada de los conflictos de su familia, Kiko ha hecho caso omiso y ha seguido cargando a su hermana de datos que no deseaba escuchar.
El empresario de la noche y cantante le ha contado a su hermana que la relación con su madre está más que rota y que seguramente esto no se solucionará jamás. Sin embargo, ha abierto una puerta a poder hacer las paces con la tonadillera si esta levanta el teléfono para hablar con él.
Kiko Rivera intenta poner a Isa Pantoja de su lado
La llamada de Kiko lejos de parecer un apoyo para su hermana, se ha entendido como una intentona suya para que Isa Pantoja se posicione de su lado y deje a su madre en la estacada. Él ha intentado negarlo pero sus intenciones se han visto muy claras y la propia Isa ha tenido que marcar distancia, mostrando una opinión muy neutral y que no favorecía del todo ni a él ni tampoco a su madre.
Rivera ha afirmado también en esta llamada que su preocupación no tiene nada que ver con el dinero y con la herencia, pues asegura que lo qué le está hundiendo es la falta de afecto por parte de su madre, un distanciamiento que a la vez, está sirviendo al joven para acercarse a sus otros hermanos, una relación que estaba muy deteriorada también por la presión que ejerce la Pantoja sobre los hermanos Rivera y la herencia de Paquirri y que aun a día de hoy, no se ha resuelto.
Por su parte, Isa Pantoja le ha pedido a su hermano prudencia y que le dé tiempo a su madre para que reaccione y que todo vuelva a su sitio. También ha dicho que puede llegar a entender a su madre, aunque su hermano le ha dicho que el tablero se había girado y que ahora él estaba viviendo lo que ella vivió cuando se distanció durante meses con su madre. Este último intento de empatizar, tampoco ha causado efecto en la nueva concursante de 'La casa fuerte'.