Kiko Hernández está muy unido a su madre con quien mantiene una excelente relación. Él mismo ha confirmado que se ha convertido en su gran apoyo para el cuidado sus hijas.
Kiko se ha convertido en uno de los grandes colaboradores de Telecinco. La cadena no duda en contar con él cada vez que su perfil se ajusta a lo que necesita un formato.
Desde hace más de 12 años forma parte de la plantilla de trabajadores de Sálvame. El esfuerzo y dedicación que ofrece al programa le han posicionado como una persona imprescindible para el mismo.
El carácter pasional que tiene a la hora debatir sobre cualquier asunto y las incontables exclusivas que ofrece forman parte de su encanto profesional. Asimismo, estas cualidades también las aplica a su vida personal.
Hace unos años decidió embarcarse en la aventura de la paternidad en solitario. Su forma de ser y el apoyo de su familia han conseguido que su experiencia sea lo más llevadera posible.
Sin lugar a dudas, una de las personas más importantes de su entorno es su madre Teresa. Él mismo lo ha dejado claro alguna vez sin dar más detalles de su intimidad. Afirmó firmemente que era la mejor persona que podrían tener su dos hijas.
Kiko Hernández tiene devoción por su madre
El colaborador siempre ha hecho todo lo que está en su mano para que a su madre no le falte de nada. Ejemplo de ello fue su temprana incorporación al mundo laboral tras el divorcio de sus padres para que a ella no le faltase de nada.
A pesar de mantener en un absoluto secretismo su intimidad en ocasiones ha realizado declaraciones abordándola. En una ocasión relató un episodio que dejó a los espectadores boquiabiertos.
En el año 2013 se obsesionó tanto por su vida laboral que su vida personal quedó relegada a un segundo plano. El tertuliano confirmó que tuvo una época en la que solo pensaba en el trabajo y dejó de lado a su entorno familiar.
Tan fue la intensidad de esta vorágine que Teresa llegó a pensar que había perdido un hijo. El terror que vivió ella en ese año tan complicado causó que la relación entre ambos se enfriara llegando incluso a distanciarse como nunca.
Sin embargo, esta obsesión enfermiza se disipó y la relación se ha vuelto a retomar como era en el pasado. De hecho, él mismo ha confirmado que su familiar está más contenta que nunca, ya que dice que vuelve a tenerle cerca.
La llegada de las niñas ha hecho que la unión entre ambos se fortalezca más y formen el tándem perfecto para la crianza de ambas. En muchas ocasiones él se ha deshecho en halagos hacia ella afirmando que es el mejor apoyo que podría tener en su día a día.
No se cansa de repetirlo tanto en la intimidad como públicamente. Tanto es así que el colaborador durante su participación en Gran Hermano le mandó una carta realzando su labor maternal. También en su programa ha mandado mensajes directos hacia ella elogiando sus cualidades.
La devoción por ella es tan elevada que solo quiere lo mejor para ella. Durante la pandemia dejó de ir a trabajar para evitar contraer el virus y contagiarle. Además, en reiteradas ocasiones, ha insistido en que se vacune para evitar el riesgo que pueda entrañar en ella debido a su edad.
Esta semana Kiko Hernández cumple 45 años y quiere que todo su entorno, en especial sus hijas y su madre, esté presente para celebrarlo. El tertuliano seguirá demostrando públicamente su valía profesional y su amor incondicional hacia su familia.