No podemos negar el gran cambio que ha supuesto 'Supervivientes' para Isabel Pantoja. Además de lo que ha supuesto el salir de su reclusión y aislamiento en Cantora, su aspecto físico ha cambiado para bien. La isla la ha rejuvenecido y llenado de vitalidad a una Isabel que se muestra de lo más simpática y conciliadora con los medios públicos.
El estar viviendo penurias tanto físicas como psicológicas, la dura convivencia con sus compañeros y la teórica ausencia de los privilegios que se rumoreaba que la cantante iba a recibir, ha mostrado una Pantoja temperamental pero cercana, eso si, sin dejar a tras sus toques de «dramatismo folclórico».
Puesta a punto incluso antes de volar a Honduras
Ya antes de ir a la isla, Isabel se hizo una puesta a punto en cuestiones de belleza y estética para lucir radiante en Honduras. Nada más llegar a Madrid, y sabiendo lo mediática que sería a partir de ahora, ha vuelto a someterse a algunos tratamientos y retoques estéticos. Su larga melena, a la que cortó unos centímetros en un trueque en la isla, necesitaba a gritos pasar por manos de especialistas para devolverle el brillo y la vitalidad perdida en la isla.
La madre de Kiko Rivera ha dicho adiós a sus canas, confirmando así que el supuesto tinte no le acompañó a la isla, como se comentó al principio. Además se le ve una piel recuperada de tanto sol donde también se ha encargado de potenciar ese intenso bronceado que se ha traído del concurso.
Pero el cambio más evidente de su rostro, son las nuevas cejas de Isabel. Antes de entrar al concurso, ya pasó por su centro estético habitual donde nos contaron que la cantante se hizo un microblading en las cejas y una manicura rusa, entre otras cosas. Pero el paso por el concurso ha hecho mella en sus retoques y ha tenido que volver a enmarcar la mirada con unas cejas más pobladas y perfectamente delineadas.
El clan Pantoja es un gran consumidor de retoques estéticos y la matriarca, no iba a ser menos. Ya en la entrevista con Jorge Javier anunció que estaba deseando quitarse con láser las llamativas cicatrices que le dejó el 'reality' en sus rodillas.