La tercera edición de 'La Isla de las Tentaciones', sin lugar a dudas, es la más 'explosiva' de todas. Y es que prácticamente desde el primer momento los participantes se han dejado llevar. Tanto es así que en solo cuatro galas hemos visto más besos que en temporadas anteriores.
Es más, el hecho de que estén fluyendo las relaciones entre las parejas y los tentadores ha propiciado que se vean situaciones realmente 'espantosas'. En concreto, la gala de ayer nos mostró a dos parejas enrollándose en el mismo sitio, dentro de la piscina.
Nada de triángulo, hay un cuadrado amoroso
Manuel es uno de los concursantes que más está dando que hablar. Y es que el gaditano no ha tenido ni tiene ningún tipo de reparo en dejarse arrastrar por la tentación.
Decidió concursar con su novia, Lucía, y desde el primer momento dejó claro que quería demostrarle a ella que había cambiado. Sí, quería que su chica se diera cuenta de que la amaba y que ya no iba a volver a serle infiel.
Sin embargo, ha tardado poco en no cumplir su reto. En la tercera gala del reality ya fue desleal a su pareja, con la que llevaba tres años. Y lo fue por partida doble. Sí, porque en la misma noche de fiesta se besó con Fiama y acto seguido con Stephany.
Precisamente las imágenes de esas dos infidelidades fueron ayer vistas por Lucía en la correspondiente hoguera. De ahí que tomara la decisión de romper definitivamente con Manuel. No está dispuesta a tolerar una infidelidad más y menos a que sean dos. De ahí que haya puesto punto y final a ese cuadrado amoroso. Y lo ha hecho tirando al fuego el anillo y la pulsera que le regaló aquel.
Un quinto entra en discordia
Anoche pudimos ver que Manuel pedía perdón a Stephany por haberse besado con Fiama. Eso sí, le indicaba que esta le atraía mucho y así la primera joven decidió apartarse de él. Le dejo el camino libre a él para que pudiera dejarse tentar por esa otra mujer.
El gaditano quedó encantado con la situación. Tanto es así que fue directamente ya a por Fiama y esta se dejó llevar. Buena muestra de eso es que en la última fiesta no dudaron en besarse por todos los rincones. Y ya sin cortarse, con los demás compañeros de villa delante.
No obstante, Stephany no se quedó de brazos cruzados. Después de que fallara lo suyo con Manuel, fue a por otro chico. Y ese no ha sido otro que Jesús, el novio de Marina.
En un primer momento, el sevillano dudó de que la tentadora realmente quisiera estar con él. Pensó que no quería ser segundo plato de nadie. Sin embargo, esa idea le duró poco. Tan poco que se le pasó cuando ella le besó de forma apasionada, después de que él le dijo que no se atrevería a hacerlo.
De esta manera, el cuadrado amoroso formado por Manuel, Lucía, Fiama y Stephany se ha convertido en pentágono con la incorporación de Jesús.
La imagen de la vergüenza
Anoche, los espectadores de 'La Isla de las Tentaciones' se quedaron alucinados con la actitud díscola de gran parte de los concursantes. Y es que la gala fue un festival de besos, caricias, toqueteos, bailes sensuales...Parece que a muchos de los participantes se les ha olvidado que tienen pareja.
No obstante, el momento que más ha indignado a parte del público ha sido el que se ha producido en la villa de los chicos. Nos estamos refiriendo al que se produjo en la piscina. Y es que la misma fue compartida por Jesús y Manuel para enrollarse con sus respectivas tentadoras, Stephany y Fiama respectivamente.
Así, como adolescentes, no se cortaron un pelo y no necesitaron intimidad ninguna. Entre amigos parece que todo vale.
De esta manera, protagonizarán un momento vergonzoso realmente. Ya no solo porque compartieran piscina para liarse sino porque lo hicieron sin tapujos delante de las cámaras. Es más, incluso sin pensar en sus novias a las que, supuestamente, tanto amaban.