Desde que Meghan Markle irrumpiera en la familia real británica, la prensa no tardaba en empezar a compararla con su difunta suegra, Lady Di, sobre todo por el insoportable acoso y escrutinio al que se veía sometida.
Algo, que irremediablemente llevaba a odiosas comparaciones incluso con su cuñada Kate Middleton, en la que hasta la llegada de la duquesa de Sussex, todos veían reflejada a Diana de Gales. Así, parecía empezar una carrera de fondo entre ambas, en la que el principal objetivo parecía ser demostrar cuál de las dos merecía ser su digna sucesora.
Guerras de estilo, cercanía con el pueblo y dos formas muy diferentes de lidiar con la fama y la presión. Sin embargo, parece que finalmente ha sido Meghan la que se ha alzado con el título, sobre todo tras la polémica entrevista que ella y el príncipe Harry le han concedido a Oprah Winfrey y que recuerda mucho a la que la propia Lady Di concedió en su momento.
'Meghan jamás será Lady Di'
Tras su polémica entrevista, la cual ya ha dado la vuelta al mundo, las diversas opiniones no se han hecho de esperar. Así, Meghan y Harry se han encontrado tanto con seguidores acérrimos que dan crédito a cada una de sus palabras, como con detractores que aseguran que lo suyo es una gran mentira con la que pretenden desprestigiar a la corona británica.
Tal y como hizo Diana de Gales en su momento, concretamente en 1995, Meghan aprovechó para sacar a la luz el duro trance por el que había pasado durante el tiempo en el que se convirtió en una más dentro de la familia real. Así, igual que su difunta suegra, denunció el mal trato que había recibido por parte de la Institución cuando pedía ayuda a gritos.
«Pedía ayuda a gritos, pero daba señales erróneas y la gente usaba mi bulimia como un abrigo en una percha: decidieron que ese era el problema, que 'Diana era inestable'», eran las durísimas declaraciones que hacía la madre de Harry y Guillermo.
Las expresiones la delatan
Sin embargo, hay quienes no han visto la misma emoción ni la misma verdad en las palabras de su sucesora, Meghan, a pesar de que ella también ha denunciado dos hechos bastante fuertes. El primero, una severa depresión que casi le cuesta la vida. «No quería seguir viviendo», eran las tajantes palabras que pronunciaba. Y, segundo, el racismo que había sufrido su hijo, el pequeño Archie: «Había conversaciones respecto al color de su piel».
Por desgracia para la duquesa de Sussex, hay quienes siguen poniendo en duda cualquier cosa que provenga de su boca. Es muy sencillo, o eres 'team Meghan' o 'team Kate', y lamentablemente ella tiene las de perder.
Incluso los expertos en análisis facial y expresiones parecen estar en su contra. De hecho, muchos aseguran que Meghan mintió en varios momentos y que no se mostró para nada natural, o que la puesta en escena fue totalmente planeada para trasmitir el efecto deseado. «Eran lágrimas de cocodrilo».
El papel de Kate Middleton: lo que calla y se niega a reconocer
Por su parte, Kate Middleton parece haber adoptado el papel de la madre, esposa y mujer sufrida que debe soportar el peso de ser un ejemplo a seguir. Así, en los inicios de su relación con Guillermo, ella también tuvo que soportar el terrible acoso de los paparazzi, y recibía el título de 'la paciente Kate'.
Sobre todo, por el tiempo que pasó esperando a que el príncipe Guillermo se decidiera por fin a sentar cabeza y pedirle matrimonio. Un acontecimiento que se convirtió en una auténtica revolución en Gran Bretaña. El príncipe por fin había encontrado a su princesa, pero su historia está lejos de ser un verdadero cuento de hadas.
Y es que hace unos años salían a relucir presuntas infidelidades por parte de Guillermo, supuestamente con una madre del colegio donde iban sus hijos e íntima amiga de la familia. Algo, que Kate habría soportado en silencio y sin rechistar.
Un hecho que curiosamente también recuerda al triángulo amoroso que protagonizaron Diana, su marido el príncipe Carlos y su actual mujer, Camilla Parker Bowles. Así, la elección de un bando u otro se vuelve más que personal. ¿Cuál de las dos es realmente digna sucesora de Lady Di?