A diferencia de 'Gran Hermano', 'Supervivientes' tiene horas muertas en las cuales no hay cámaras que graban a los concursantes. En estas horas y según cuenta Cristian Suescun, que ya ha vuelto a España después de haber sido expulsado, nació una relación especial entre dos de los concursantes, que hasta ahora no se habría visto en pantalla y que vendría a explicar la nueva enemistad entre Rocío Flores y José Antonio Avilés.
En la última gala, Jorge Javier Vázquez preguntó a Avilés si le gustaba Albert Barranco y este dijo que no, pero de ser así, se entendería su enfado con Rocío Flores que cada vez está más cerca del catalán.
Además, según Suescun, ha presenciado en la isla masajes y juegos extraños entre Barranco y Rocío Flores, que no han sido recogidos por las cámaras pero que si que han podido ver los compañeros, levantando así envidias y diferencias entre los pretendientes de Albert Barranco.
De este modo, estaríamos delante del fin de una de las relaciones amistosas más estables dentro del concurso. Hasta hace pocos días, Flores no dudaba en ponerse a todos sus compañeros en contra para defender a su amigo Avilés, pero ahora algo ha cambiado y ha pasado de ponerse el mundo por montera a detestarlo e incluso, pedirle que no vuelva a hablarle jamás.
José Antonio Avilés y Rocío Flores separados por el corazón de Barranco
Con todos los elementos que hemos conocido hoy, podríamos llegar a entender esta guerra que se ha iniciado en la isla y que han llevado incluso a Avilés a sacar a relucir cosas del pasado de Rocío, que según parece, la dejarían en una muy mala posición y que de ser desvelado al gran público, podrían hacer peligrar la continuidad de la hija de Antonio David Flores en el concurso de supervivencia.