La vida de Concha Velasco ha experimentado un cambio brutal en cuestión de meses. Hace unas semanas abandonaba su casa para trasladarse de manera definitiva a una residencia. En el citado centro recibe cuidados las 24 horas y se encuentra bajo el control de profesionales que le hacen más agradable la estancia.
La actriz, de 82 años, presenta ciertos problemas de movilidad que le impedían seguir con su carrera artística, pero también con su día a día. Recientemente, un buen amigo de ella, como es el periodista Jesús Mariñas, explicaba cómo evolucionaba y se deshacía en elogios hacia la vallisoletana.
Al parecer, Concha se ha adaptado a la perfección en la residencia. Trata de llevar una vida lo más normal posible, recibiendo muchas visitas y saliendo los fines de semana. Hay que decir que sus hijos están muy pendientes de ella y de su bienestar.
En un primer momento, Paco y Manuel decidieron que lo más conveniente era llevársela a vivir con ellos. Pero con el paso de los días apreciaron que aquello iba a resultar muy complicado. Requería de unos cuidados especiales que solo se los podrían dar en una institución con personal cualificado.
En vista de eso creyeron que lo mejor era internarla en un centro. Hace unos días se conocía que la actriz llevaba desde hace tiempo con problemas de artrosis. Esta patología le fue mermando la movilidad hasta dejarla casi en una silla de ruedas.
Manuel Velasco confesaba hace poco que su madre se encontraba perfectamente. Quiso trasladar a sus seguidores un mensaje de tranquilidad. Su intención es seguir protagonizando muchas portadas de revista.
Incluso en algún momento se comentó que Concha Velasco tenía previsto continuar con su carrera en los teatros. Pero fueron sus chicos los que la tuvieron que frenar. Entendían que había llegado el momento de retirarse de los escenarios, por mucho que le doliera.
Ella estaba dispuesta a seguir actuando. Nunca quiso retirarse, y en más de una ocasión se sintió molesta cuando se le preguntó por su final sobre las tablas. Las fuerzas no le fallan aunque la veamos desplazándose en silla de ruedas.
Francisco, el discreto hijo de Concha Velasco estuvo a punto de morir
Una de las personas que mejor la conoce es Jesús Mariñas. Desvelaba que la vallisoletana "tiene mucho que contar de sus vivencias artísticas y personales. Es todo un ejemplo de entrega".
Añadía que "como gran artista que ha sido y sigue siendo, su día a día nos sigue interesando". Agradeció que fuera tan sincera a la hora de detallar su situación, algo que deberían imitar otros artistas. "Nada mejor que entenderse, adoptar tal postura, de hablar con claridad y tener un comportamiento responsable con el público", señaló.
En su opinión, la normalización del estado de salud "daría paso a una nueva etapa de comunicación humana, más entrañable. Facilitaría un entendimiento más cercano e íntimo", contó el periodista.
Concha Velasco sigue vinculada al teatro
Concha Velasco no tuvo inconveniente en desvelar que se había mudado a una residencia. Asume perfectamente este estado, y tampoco tiene intención de ser un estorbo para sus hijos.
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En el centro especializado está muy cuidada y se le presta mucha atención durante las 24 horas del día. Se encuentra como si estuviera en su propia casa, pero con la atención de personal cualificado. Allí trata de seguir con su vida con total normalidad.
Hace apenas unos días se le pudo ver en el teatro. Por lo general, solía ser ella la protagonista, pero en esta ocasión le tocó sentarse en el patio de butacas como una espectadora más. Acudió a ver la obra de Jorge Javier Vázquez y al musical de Antonio Banderas.
Concha Velasco no está dispuesta a que nada le frene. Y mucho menos cuando se trata de disfrutar de algo que le apasiona como es el teatro.