Hoy Telecinco nos ha ofrecido un nuevo capítulo de la docu serie 'Rocío. Contar la verdad para seguir viva', concretamente se trata de la décima entrega y que se titula 'Vibro'. En esta, Rocío Carrasco cuenta la relación que tuvo en el pasado con su hijo David Flores y que poco a poco se fue enfriando por los duros desencuentros que vivió en su casa y por la utilización que hizo su padre Antonio David Flores de él para alejarlo de su madre.
Carlota Corredera ha empezado el programa avanzando que en este episodio íbamos a ver la boda de Rocío Carrasco y Fidel Albiac y con ello mandaba un mensaje muy directo a todos los negacionistas del relato de la protagonista de la docu serie. La presentadora ha querido recordar que una persona que sufre una depresión puede tener momentos de diversión y esbozar una sonrisa, aunque por dentro se le esté comiendo una angustia devastadora.
Ante esto, ha pedido a los negacionistas de Rocío Carrasco que empiecen a preparar su rabieta en contra de este relato y que dediquen todas sus fuerzas a criticar que sonría mientras asegura padecer una depresión. Pero esto no ha acabado aquí, Corredera ha hilado mucho más fino y se ha referido a la programación de mañana, una pista que nos ha hecho pensar en 'El programa de Ana Rosa' y que se ha confirmado cuando hemos podido ver en la pantalla principal del plató a Beatriz Cortázar, Alessandro Lecquio e incluso a la propia Ana Rosa Quintana, dejando muy claro para quién iban esos dardos.
Los sentimientos de Carlota estaban a flor de piel e incluso una lágrima ha caído por sus mejillas cuando ha podido ver las imágenes de la boda de Rocío Carrasco. En estas se la veía radiante, disfrutando del momento, pero sabiendo que le faltaba algo, sus hijos y que no estaban presentes en uno de los momentos más importantes de su vida. Durante años, Antonio David Flores contó en los platós que su exmujer no había invitado a los niños a su enlace, algo que hoy mismo ha quedado totalmente desmentido.
La hija de Rocío Jurado ha contado que sus hijos no recibieron ninguna invitación para la boda porque ellos formaban parte del enlace y que no tenían que ser invitados porque ya se había hablado que pasarían el verano con el padre y que luego en setiembre, al menos el hijo pequeño, acudiría a la boda de su madre con Fidel. De hecho, hoy mismo hemos sabido que el pequeño ya tenía un traje comprado con su camisa y sus zapatos, siendo prueba más que evidente de que el menor iba a acudir y participar de este festejo.
La estrategia habitual de Ana Rosa
La presentadora del programa ha dado bastante en el clavo diciendo que quizás estas críticas feroces hacía Carrasco se deben a que les habría gustado ser ellos los que hubiesen descubierto esta trama y que ahora, lo único que les queda por hacer es cargar en contra de ellos e intentar desacreditar todas y cada una de las pruebas que van apareciendo. Sin embargo, podemos ir un poco más allá y destapar la estrategia de Ana Rosa Quintana y su equipo.
Cuando 'Sálvame' destapó el tema del engaño de Toño Sanchís a Belén Esteban, el programa de Ana Rosa al ver que no podían tener a la princesa del pueblo decidieron contratar al representante que aun y sabiendo que estaba mintiendo les servía para tener allí sentado a una de las partes y asegurarse así estar aunque fuese un poco en medio de este berenjenal. Ahora han hecho lo mismo, Rocío Carrasco está con la productora de 'Sálvame' y ellos para contrarrestarlo han fichado a Rocío Flores y que bajo el pretexto de comentar 'Supervivientes' la tienen cada mañana soltando titulares a favor de su padre y muy en contra de su madre.