«Un auténtico infierno». Así definen los profesionales implicados el brote de coronavirus que ha dejado varios contagios durante la grabación del programa «Prodigios» de TVE. Entre los contagiados está la directora del programa, operadores de cámara, maquilladores, miembros del jurado y varios niños.
Los participantes del concurso y los empleados fueron convocados entre el 16 y el 28 de enero en el Auditorio del Centro Cultural Miguel Delibes, en Valladolid, para la grabación de las galas de la tercera temporada. A la cita acudieron la directora y los miembros del jurado junto con cámaras, técnicos de sonido, maquilladores y hasta 27 niños seleccionados para participar en el concurso.
Pero el primer día de grabación empezaron los problemas con varios positivos por Covid-19 entre los niños. «Prodigios» mide las habilidades en canto lírico, danza y música instrumental. Varios bailarines e instrumentistas entre 7 y 17 años que ensayaban y actuaban durante los ensayos dieron positivo, pero las grabaciones siguieron adelante.
A pesar del desconcierto por los primeros casos de coronavirus en los ensayos, el trabajo de los profesionales continuó. El brote fue propagándose y los siguientes en infectarse fueron los miembros del jurado, que durante el concurso van sin mascarilla y en varias ocasiones interactúan directamente con los niños.
Una de las contagiadas es Ainhoa Arteta. La soprano dio positivo en coronavirus y desde entonces se encuentra en aislamiento, hasta el punto que ha tenido que suspender su actuación en la ópera «Manon Lescaut» que tenía programada en Pamplona. Según fuentes internas también estarían contagiados el presentador Boris Izaguirre y el bailarín y coreógrafo Nacho Duato, aunque este extremo no está confirmado.
Indignación entre los afectados
El brote ha afectado también a la directora, Begoña Martín. Su baja obligó al programa a recurrir a Ana Rivas, responsable de Entretenimiento de la productora, para que se encargase de la dirección de las grabaciones. La productora del programa, Shine Iberia, asegura que ha cumplido los protocolos sanitarios estrictamente, pero no se han facilitado más detalles de cómo se produjo el brote en el auditorio.
El caso ha levantado una oleada de protestas entre los implicados, que se quejan de que las grabaciones siguieron adelante a pesar de los contagios. El personal fue obligado a continuar los trabajos, mientras que algunos decidieron abandonar por miedo a contagiarse. Entre los familiares de los niños también reina el enfado, porque aseguran que no se les informó debidamente del brote que estaba teniendo lugar.
Shine Iberia fue una de las primeras productoras en volver a la actividad tras el confinamiento de la primera oleada en España. Durante la desescalada retomó las grabaciones del espacio MasterChef, y a partir de ahí acumuló una gran experiencia en protocolo anti-Covid.
Medidas anti-Covid en Castilla y León
El brote tuvo lugar en Valladolid y la comunidad castellano-leonesa ha sido una de las más afectadas por la tercera ola: más de 200.000 casos desde diciembre, en una escalada que llegó a multiplicar por 12 la incidencia acumulada de la pandemia.
A raíz de esto, la Junta de Castilla y León anunció un endurecimiento de las medidas el pasado 15 de enero, justo un día antes del inicio de las grabaciones de la tercera temporada de «Prodigios». Se redujo a cuatro el máximo de personas en reuniones sociales, se limitó el aforo al 25% en celebraciones religiosas, se adelantó el toque de queda a las 20.00 horas y se impuso un cierre perimetral de todas las provincias.
Mientras la productora defiende su inocencia y los implicados muestran su enojo, Televisión Española guarda silencio. A pesar de la gravedad del caso, un portavoz de la corporación ha asegurado que no van a realizar ningún comentario al respecto.