Ana María Aldón es, sin duda, una de las víctimas colateralas del documental ya que a pesar de no tener nada que ver con el drama, ya que ni siquiera estaba en la vida de Ortega Cano por aquel entonces, no ha podido evitar verse salpicado por asunto.
Y más cuando trabaja como colaboradora en un programa de la talla de 'Viva la vida', donde lo quiera o no, se verá obligada a responder a las preguntas de los colaboradores y estar en primera línea del huracán.
Así, la mujer de Ortega Cano ha tenido que hacer frente a muchas críticas, sobre todo relacionadas con la actitud que ha mostrado ante el tema de Rocío Carrasco, aunque es normal que tome partido por su marido, ya que ha tenido poco o nulo contacto con Rociíto.
Todo explotaba después de que Ana María afirmase que el tema de Rocío parecía no tener fin, sobre todo en lo relacionado al acoso mediático que sufre su familia. Algo, que tiene pinta de alargarse al menos durante varias semanas más.
Aunque, lo que seguro que no esperaba era tener que enfrentarse a la gran cantidad de críticas que ha recibido por ese simple comentario, tal y como ha denunciado.
«Vieja, ridícula, pidiendo que Rocío Carrasco no hable, el que tenga en rabo de paja no se arrima a la candela. Ella tiene todo el derecho a hablar, no solo lo tiene ese pelele de Antonio David. Asquerosa oportunista, perra vieja», le han llegado a escribir. Algo, ante lo que la mujer de Ortega Cano no se ha querido quedar callada y ha respondido con firmeza.
«¿Os parece normal este comentario? ¿En qué momento he pedido que Rocío Carrasco no hable? La educación y el respeto brilla por su ausencia, ¿no creéis?», ha replicado ella muy molesta a sus detractores.
La diseñadora asegura estar muy cansada de todo el escándalo que se ha generado y que ha puesto su vida patas arriba. «Lo he pasado mal, tenía ganas de que un tsunami me llevara. El documental es que no tiene fin». Además, a eso se suma que le preocupa muchísimo el estado de salud de su marido, quien ha optado por no ver el documental por su propio bien, ya que podría afectarle mucho y provocarle una subida de tensión.
«La salud de él es lo que más me preocupa. Está bien de salud pero se sigue encontrando mal y la tensión sigue subiendo», le explicaba a Emma García al respecto de como toda esta situación le estaba afectando, y eso que todavía no ha mencionado al diestro directamente, salvo para afirmar que su madre, Rocío Jurado se había equivocado al casarse con él o que Antonio David se había encargarlo de asustarle para que no hablase.
Unas durísimas palabras ante las que lo único que ha dicho Ortega Cano, es que su amor por Rocío Jurado era de lo más real, y que todavía a día de hoy la sigue queriendo. Algo, que confirmaba la propia Ana María Aldón.
La peor parte de representar a su familia en la televisión, como también le ocurrió a Irene Rosales, -la cual tuvo que soportar todo el peso del drama y la guerra familiar entre Kiko Rivera y su madre, Isabel Pantoja-, es la presión con la que debe lidiar, ya que en cierta forma debe hablar en nombre de todos, evitando inmiscuirse más de la cuenta.
Un asunto peliguado en el que nunca llueve a gusto de todos, como bien revelaba la supuesta llamada que Ana María recibió en pleno directo en 'Viva la vida' hace una semana, y la cual, José Antonio Avilés, aseguraba que provenía de alguien que le echaba la bronca, -el tertuliano aseguraba que se trataba de Gloria Camila-, y le pedía explicaciones. Sin duda, una situación muy muy complicada que Ana María está desenado que termine.