Ana María Aldón ya no se calla ni una. La mujer de Ortega Cano ha dicho basta tras recibir unas feroces críticas en redes sociales.
Sobre todo, porque iban dirigidas contra su marido. "¿Feminista y pacifista? ¿Tú?, ¿qué me dejas estos comentarios? No, cariño. Tú no eres ninguna de estas dos cosas", ha explotado contra una de sus detractoras en un vídeo de Instagram.
Una usuaria a la que no le ha temblado el pulso a la hora de comentarle: "Vaya marido te has buscado, dile que cuando hable no ponga vocecita para hacerse el bueno. ¡Qué no lo es!"
"¿Te crees que eres tan importante como Rocío Jurado?", proseguía el ataque. "No le llegas ni a la planta de los pies. Envidiosa, eso es lo que eres, y cateta".
Además, tampoco dudaba en atacar a Aldón por su profesión. "Eres incapaz de vivir de tu trabajo de diseñadora".
Denunciar este tipo de actitudes ya se ha vuelto una costumbre entre las celebridades, y es que hoy en día cualquiera puede poner auténticas barbaridades en redes sociales sin tener casi consecuencias.
Ana María se ha dejado la piel defendiendo a los suyos en televisión desde su puesto como colaboradora en Viva la vida. "No solamente es por mi marido. Me pongo también en la piel de Gloria Camila, me pongo en la piel de toda la familia".
Y ahora parece que también le toca hacerlo en redes sociales. El clan de los Mohedano vuelve a hacer frente nuevamente al huracán de Rocío Carrasco, que arremete con todas sus fuerzas.
La hija de 'la más grande' ha vuelto a la televisión por la puerta grande para rendirle un homenaje a su madre. Sin embargo, eso ha afectado de lleno al resto de sus familiares.
Principalmente, a Ortega Cano y sus hijos, que han descubierto a través de los medios qué fue de las pertenencias de la difunta Rocío Jurado.
Al parecer, Rociíto se había encargado de guardarlas en un almacén durante 13 largos años. Al menos, hasta la fecha, cuando está más que dispuesta a mostrarlas públicamente.
En total, nada menos que 36 toneladas de material privado de la inolvidable artista guardados en 18 contenedores.
Ropa, fotografías, documentos privados y muebles, entre otras cosas, que Rocío Jurado dejó en herencia a su primogénita.
Ana María Aldón da la cara por los suyos en un momento muy delicado
Todas ellas se encontraban en la finca de La Moraleja, y según manifestaba el propio Ortega Cano, él no tuvo acceso a ninguna de ellas.
"Me fui de aquella casa con lo puesto", recordaba acerca del momento en el que Rociíto le pidió que abandonase la propiedad.
"Me lo comunicó y yo cogí mi ropa, a mis hijos y me fui a La Yerbabuena. Entonces no tenía la cabeza para pensar en lo que dejaba o en reclamar nada".
Dispuesta a apoyar a su marido, Ana María Aldón aceptaba acercarse hasta la vivienda para verla de cerca, lo que no le resultó nada sencillo.
"No es cómodo para mí porque me imagino todo lo que tuvo que pasar aquí, en la última época que vivieron, cuando mi marido se quedó aquí solo que me ha contado anécdotas y miedos", reconocía.
La colaboradora de Viva la vidacontaba que el torero había pasado unos días muy duros en La Moraleja, "en especial una noche muy dura con sus niños aquí solo y llegó a pasar miedo. Las noches las pasaba llorando".
Y aseguraba estar con los nervios a flor de piel. "Estoy curiosa por ver detalles, pero también expectante porque no sabemos qué vamos a encontrar. Vajillas, documentos, trajes… Me imagino que los enseres de la vivienda".
La mujer de Ortega Cano ha dejado muy claro que lo que más le duele y le preocupa del tema de la docuserie, es lo que puede hacer revivir a su familia, en este caso a su marido y a Gloria. "De mi marido recuerdo su mirada al ver lo que va a pasar, me transmitió tristeza".