Adara no está pasando por su mejor semana. Si los colaboradores de ‘Telecinco’ ponían en entredicho su versión sobre su dura infancia, ahora se enfrenta a las duras declaraciones del Maestro Joao.
Adara y el Maestro Joao se convirtieron en amigos íntimos durante su participación en ‘Gran Hermano VIP’. La suya era una relación de amistad más que consolidada. O eso se pensaba. El paso del tiempo y la multitud de enfrentamientos entre ellos han provocado que la relación terminase por destrozarse del todo. Y, para rematar, Joao ha decidido hablar de ella.
Una relación destrozada por la mentira
Nada queda de aquella bonita relación de amistad que forjaron en la casa. Juntos protagonizaron algunos de los momentos más importantes de la edición. Adara le confesó sus secretos más íntimos sobre su relación con Hugo Sierra, el padre de su hijo. Llegó a decirle que no se sentía deseada, que hace tiempo que quería alejarse de él y emprender una nueva vida.
La aparición de Gianmarco lo cambió todo. El Maestro Joao apoyo su relación desde el principio, pero tras varios enfrentamientos televisivos lo bueno dejo de serlo tanto. Por eso Joao ha decidido soltar algún que otro dardo envenenado contra la hija de Elena Rodríguez.
Así como es él, sin pelos en la lengua, Joao ha expresado su malestar con Adara a través de sus redes sociales. «Deja de creerte tus mentiras y de engañar a la gente. ¿Recuerdas que en el confe viste algo y seguiste rajando? Ahora tengo claro que era tu plan y como eres una rastrera haces cualquier cosa con tal de salir porque tienes una mente podrida», ha dicho el vidente.
Y es que parece ser que la atracción del público por Adara y su sinceridad en el confesionario fue todo una mentira bien preparada. Cuando pensaba que nadie les grababa la hermana de Aitor se embarcó en numerosas confesiones con Joao. Fue testigo directo del enamoramiento que Adara sentía por su compañero de concurso Gianmarco y de las ganas que tenía la joven de poner punto y final a su relación con el padre de su hijo.
Joao ha puesto en tela de juicio este momento, que tantas horas de televisión ocupó. Según él, Adara habría podido ver el movimiento de una de las cámaras robotizadas del confesionario. De esta forma la joven se habría percatado de que todo estaba siendo grabado, aunque hiciese creer a la audiencia que pensaba que no se estaba filmando al ser uno de los considerados como puntos ciegos de la casa.