La muerte de la joven Rocío Wanninkhof, que sucedió en 1999 y que conmocionó al país, ha vuelto a cobrar protagonismo. Todo porque se ha hecho una serie sobre la injusticia que se cometió con Dolores Vázquez. Esta fue condenada por dicho crimen, aunque años después se descubrió que el responsable del mismo había sido Tony King.
A través de dicha producción, ha tomado la palabra la señalada y también la madre de la víctima, Alicia Hornos. Pero no son las únicas. Ahora también ha hablado Tony Jurado, el que por aquel entonces era novio de la joven.
En estos momentos, tiene una vida alejada de aquí tras sufrir un verdadero calvario con la desaparición de su chica.
Tony Jurado, la pareja de Rocío Wanninkhof, y su nueva vida
Tony ha decidido hablar y lo ha hecho en Sálvame. Lo ha hecho para respaldar a su madre, Charo, quien previamente había dado unas declaraciones al programa. Declaraciones en las que arremetía contra Alicia, después de que esta anunciara que iba a tomar medidas legales contra quienes aparecían en la serie.
Exactamente, al sentirse aludida, había dicho sobre Hornos: “Me ha hincado un puñal en el pecho, habla muy malamente de mi hijo y de mí. Si ella quiere querellas, va a haber querellas. Que no me haga hablar porque vamos a llegar a las nubes”.
Tras todo esto, Jurado ha entrado por teléfono en el citado espacio y lo primero que ha querido hacer ha sido disculpar a su madre. Así, ha expuesto: “Quiero justificar el nerviosismo que puede tener dentro o lo que siente por mí porque lo está demostrando verbalmente hacia Alicia. Quiero pedir perdón por su parte, entended que como madre ha sufrido mucho”.
Luego, ha dado a conocer que él tiene una nueva vida alejada de Málaga y del caso Wanninkhof. Reside en Finlandia y allí ha creado un hogar. Ha explicado: “Quise probar un país diferente, por motivos laborales, me vine aquí y tengo una familia maravillosa”.
Eso sí, ha dejado claro que todo lo que sufrió le ha pasado factura: “Yo, con 42 años, tengo lagunas mentales. No sé si por la presión que viví”.
Tony Jurado desvela lo que sufrió por el caso de Rocío
Cuando se produjo la desaparición de su chica y después se halló el cadáver de esta, los investigadores del caso miraron hacia él. Pensaron que podía ser el responsable y esto supuso que Tony, que en ese momento tenía 19 años, viviera un verdadero infierno.
De esta manera lo ha narrado en Sálvame: “La opresión del ámbito policial cuando hice mis declaraciones fue enorme, la manera en la que se te cohíbe y se te anula como persona. Tanto es así que yo pensé en declararme culpable para no aguantar todo esto. Cuando señalaron a Dolores yo me quité un peso tremendo de encima”.
“Con esa edad, yo sabía que me hablaban, pero no entendía lo que me decían. Comprendo que puedan sospechar, que tengan un indicio y se te pueda llevar a un extremo, pero es que en mi caso no tenían nada. Era una pesadilla diaria, mañana y noche”.
De forma contundente ha afirmado: “Cuando salí de comandancia, ya no era un niño, era una herida sangrando. Unos meses antes un chico había matado a su pareja, entonces a mí directamente se me puso en la diana. Se hizo la investigación a partir de ese baremo y se me señaló como el asesino”.
“Cuando llegaron a mi casa para llevarme a comandancia, empecé a recibir tortas desde el minuto uno. Me empezaron a decir: «Niñato de mierda, canta, porque sabemos que eres tú». Día y noche recibía guantazos y aguanté ese calvario hasta que apareció lo de Dolores”.
A esto ha añadido: “El que sufre, al final, es el que está vivo y se come todo el marrón. He pasado un 40 % de lo que sufrió Dolores. Puedo sentir lo que ella ha sentido, incluso ella ha sufrido mucho más porque ha estado condenada y ha estado en prisión”.
Y es que, como ha llegado a confesar, tuvo incluso que soportar perder amistades. Ha dicho: “Mis amigos dejaron de tratar conmigo por las acusaciones que se me hicieron”.
Un presente y un futuro esperanzador para Jurado
De igual modo, ha afirmado: “Hubo un mal procedimiento de investigación, un mal juicio. Se hizo tan mal aquello que doy gracias a Dios que no me senté yo porque lo que le pasó a Dolores me podía haber pasado a mí. Aquello fue un circo”.
Para concluir, ha dicho que no guarda rencor por todo lo que pasó, solo dolor. No obstante, ha dejado claro que él ha pasado página: “La vida da cosas buenas y malas y desgraciadamente nos tocó a nosotros. Pero hay que seguir, ser feliz y pensar en uno mismo”.
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