Muchos inversionistas principiantes se han visto atraídos a los mercados financieros durante la pandemia debido a la creciente cobertura que los medios de comunicación han dado a las fuertes fluctuaciones que las bolsas de valores a escala global han visto recientemente debido al shock económico de este evento.
Esta tendencia ha sido particularmente positiva ya que ha empujado a las personas a conocer más sobre los beneficios de invertir en los mercados de capitales.
Dicho esto, si eres una de esas personas que se ha sentido atraída a poner primera vez algo de dinero en el mercado, debes comprender el escenario en el que la economía global se encuentra y cómo la reciente tendencia al alza puede reversarse rápidamente si los principales jugadores del mercado sienten que el suelo se está moviendo bajo sus pies.
Las principales variables que están moviendo los mercados en el cuarto trimestre
El cuarto trimestre ha arrancado con débiles proyecciones para las ganancias corporativas durante el tercer trimestre de acuerdo a información de la empresa de investigación FactSet, donde se evidencia que los niveles de rentabilidad de las firmas que componen el índice S&P 500 caerán 21.8% en promedio durante este período debido al impacto de la pandemia.
Sin embargo, el ratio de precio-ganancias del S&P 500 se mantiene por encima de su promedio de 5 y 10 años – niveles que parecen difíciles de justificar a primera vista debido a la significativa incertidumbre en cuanto al futuro de la economía global.
La razón para esta atípica desconexión entre las ganancias y las valoraciones bursátiles es la intervención sin precedentes de los bancos centrales a lo largo del mundo a través de inyecciones masivas de liquidez, lo cual ha provisto una especie de suelo para el valor de los activos financieros.
Sin embargo, esta aparente estabilidad continúa dependiendo de la percepción que los actores del mercado tengan sobre el futuro de la economía – entre otras variables – ya que las cosas pueden dar un vuelco en cualquier momento si el impacto económico de la pandemia termina siendo mayor y más prolongado que lo esperado.
Por otro lado, Estados Unidos se dirige a una de sus elecciones presidenciales más controversiales de las últimas décadas, con un posible resultado disputado, lo cual añade un riesgo extra a la estabilidad de los mercados, ya que dicho escenario puede disparar el pánico en Wall Street.
Adicionalmente, la materialización de una segunda ola del virus en Europa, con varios países del continente ya viendo niveles de infección por encima de los máximos de inicios de año junto a unidades de cuidados intensivos al borde de su capacidad, se suma a los múltiples y complejos catalizadores negativos que acechan las valoraciones bursátiles.
Junto a Europa, EE. UU. parece estar también entrando en lo que podría ser su tercera ola del virus, con múltiples estados viendo un incremento en el número de hospitalizaciones mientras que parece difícil que una vacuna viable esté disponible antes del fin de año debido a múltiples pausas en los estudios clínicos.
Dado este contexto, el mercado de valores parece dirigirse a un período de fuerte turbulencia, lo cual añade un cierto nivel de complejidad para los inversionistas – especialmente si estos no tienen experiencia previa.
Con grandes riesgos vienen también grandes oportunidades
El desplome de la bolsa en Febrero- Marzo evaporó trillones de dólares en riqueza y envío el precio de muchas acciones a sus mínimos históricos en cuestión de semanas. Sin embargo, este período fue seguido por un fuerte rebote debido a la intervención de los bancos centrales.
Los inversionistas que tuvieron el estómago para tomar posiciones en empresas sólidas que definitivamente iban a sobrevivir la crisis vieron sus portafolios dispararse desde esos mínimos y, en esta oportunidad, podría presentarse una situación similar si los mercados entraran en pánico debido a los elementos citados anteriormente.
Si apenas comienzas en el mundo de las inversiones, podrías tomar ventajas de estos bajos precios para adquirir posiciones en largo a las que puedas aferrarte por largo tiempo mientras la economía se recupera.
Esto puede hacerse a través de la adquisición de vehículos como los fondos indexados (ETFs, por sus siglas en inglés) que imitan el desempeño de índices como el S&P 500 o el Nasdaq 100 o podrías también comprar acciones individuales de empresas con fuertes hojas de balance e ingresos relativamente estables.
Adicionalmente, una fuerte caída en el precio de las acciones puede ser una buena oportunidad para comprar valores considerados como “ganadores de la pandemia”, es decir, compañías que se han beneficiado de algunas tendencias como el trabajo desde casa.
Para finalizar
El escenario en el cual un inversionista novato inicia su trayecto en el 2020 está lleno de fuertes retos. Sin embargo, eso no significa que debes mantener alejado.
De hecho, una bajada temporal podría ser una oportunidad irrepetible para comprar excelentes compañías a precios bastante bajos con perspectivas de obtener beneficios una vez la economía global se recupere.