Los contagios por coronavirus siguen creciendo según van pasando las jornadas debido a los numerosos rebrotes que estan apareciendo en todo el territorio español. La situación comienza a ser más complicada en algunas zonas concretas, donde incluso han vuelto al confinamiento.
Además de la mayor presencia del coronavirus en España, la población tiene miedo de presentar síntomas de la enfermedad: fiebre, tos seca, cansancio. Pero, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), los positivos también pueden presentar dolor de cabeza, congestión nasal, molestias generalizadas, dolor de gargante, pérdidas del gusto y olfato, erupciones cutáneas o hasta cambios de color en los dedos de las manos y de los pies.
Las claves del periodo de incubación
La aparición de síntomas puede llegar al quinto día de haber sido contagiado, pero este periodo de incubación puede durar hasta 14 días, ya que coronavirus tarda un tiempo en ser detectado.
Además, están los casos asintomáticos, que sufren o han sufrido el virus y no lo han sabido porque, como su propio nombre indica, no han presentado los síntomas del covid-19, y el organismo consigue acabar con el virus sin hacer ningún tratamiento. Estos casos son también un serio problema, ya que en muchas ocasiones se desconoce la presencia del virus y se puede llegar a contagiar a otras personas sin saberlo.
Según los datos del informe científico-técnico del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, el periodo de incubación medio está en torno a los cinco o seis días, y el 97,5% de los casos que son asintomáticos pasan este periodo en 11,5 días después de haber estado expuestos al coronavirus.
¿Por qué son tan importantes los contactos estrechos?
Hay que reseñar que la transmisión del virus puede darse un día o dos antes de tener los síntomas, y es cuando entran a escena los contactos estrechos, que se deben detectar cuanto antes, y que son aquellos «que han estado en contacto con una persona con síntomas compatibles o diagnosticada de COVID-19, desde 48 horas antes del inicio de síntomas o del diagnóstico si la persona es asintomática», según apunta el Ministerio de Sanidad.