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Segunda oleada: Las 8 actividades a evitar para no provocar un rebrote

Según datos de Sanidad el 34% de los rebrotes se producen en el ámbito social y preocupan especialmente los del ocio

Los datos no engañan: España ya es el país de Europa con una peor situación epidemiológica desde la nueva normalidad. La situación es crítica. Sanidad anunció ayer que ya son 412 los brotes en todo el país, y que en las últimas horas se registraron 1.229 casos confirmados y 2 fallecidos. Además, reconocen que hay algunos rebrotes a punto de descontrolarse.

Pero durante la rueda de prensa diaria, Fernando Simón dio otros datos interesantes. Según Sanidad, el 34% de los brotes se producen en el ámbito social: las fiestas familiares suponen 90 brotes y 770 contagios. Sólo hay 30 brotes asociados al ocio, pero representan 1.000 casos.

A todo eso, los expertos ya no tienen ninguna duda de que el virus ha cambiado y también su forma de actuar. En la nueva normalidad, la forma de contagio evoluciona, y el cuadro de los rebrotes permite elaborar una tipología de actividades de riesgo que está llevando a una mayor incidencia del SARS-CoV-2 en una sociedad al borde de la segunda oleada.

1. Ocio nocturno

La última noticia preocupante llega de Valencia: «Jóvenes que fueron a una discoteca donde surgió el brote se niegan a hacerse la prueba PCR». Pero no es la única. Estas semanas abundan los titulares inquietantes sobre brotes masivos iniciados en macrofiestas y zonas de ocio, como botellones y discotecas.

El 10% de los brotes están relacionados con zonas de ocio. En las discotecas se generan muchos casos difíciles de trazar, y algunas comunidades (Cataluña, Canarias, Cantabria y Asturias) aplican ya restricciones de ocio para contener los contagios.

2. Botellón

Considerado dentro del ocio nocturno, el botellón merece sin embargo un trato especial porque está siendo uno de los principales focos de contagio y el más difícil de atajar. Algunos lugares, como Toledo, han establecido una prohibición tajante en este sentido.

Los botellones, esas reuniones de jóvenes en torno al alcohol, son el origen de muchos rebrotes que se están produciendo en varias provincias. El propio consumo hace que se relajen las medidas de prevención y, además, dificulta el rastreo posterior por el sesgo de la memoria a la hora de informar de posibles contagios.

3. Ámbito laboral

Apenas inaugurada la nueva normalidad estalló en Aragón uno de los peores brotes registrados hasta ahora en España. Le siguió el de Lérida, que ha tenido en vilo a toda Cataluña durante varios días. Los expertos alertan de que el sector de los temporeros es muy difícil de tratar ya que necesitan trabajar para cobrar el jornal y se niegan a hacerse las pruebas.

La Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria advierte: Hay descrito mayor riesgo en aquellos trabajos donde es más fácil mantener precauciones individuales y las personas que tienen peores condiciones de habitabilidad. 

4. Reuniones familiares

El ámbito familiar como foco de contagio también estuvo muy presente durante los primeros brotes tras abandonar el estado de alarma, y su incidencia no ha dejado de crecer durante la nueva normalidad: cumpleaños, barbacoas, comuniones, bares, terrazas…

Según datos de Sanidad, 4 de cada 10 rebrotes en España tienen su origen en las reuniones familiares. Por eso las autoridades sanitarias hacen un llamamiento a extremar el cuidado. Es preferible evitar este tipo de reuniones pero, si se celebran, hay que extremar las medidas de seguridad: mascarilla, higiene de manos y distancia de seguridad.

5. Turistas

Según un estudio del Instituto Carlos III, los turistas apenas suponen un 1,8% de los casos. Los expertos coinciden: el aeropuerto en sí no es un lugar de riesgo. El problema son los viajeros que proceden de un país con mayor transmisión del virus y que pueden originar brotes secundarios a su llegada a España.

La Comunidad de Madrid insiste al Gobierno en la necesidad de un protocolo que refuerce el control el Barajas. Desde hace semanas, es el principal coladero de contagios en España, y los profesionales denuncian la falta de medios para detectar positivos entre los viajeros.

6. Bodas, bautizos y comuniones

A principios de julio, recién estrenada la nueva normalidad, una boda celebrada en Tudela, Navarra, dejó más de una veintena de positivos. En otras provincias, los banquetes celebrados con motivo de bodas y comuniones están en el origen de varios rebrotes.

Los expertos advierten del peligro que supone cierto tipo de conductas relajadas que se dan en reuniones sin ningún tipo de precaución. En este caso, la confianza propia de las relaciones familiares y la relajación de las medidas en un ambiente festivo son un cóctel explosivo que lleva a contagios masivos. Las autoridades hacen un llamamiento a la responsabilidad.

7. Centros de mayores

Durante la primera oleada fue el gran foco que causó decenas de miles de contagios y muchas muertes. Aunque en un principio parecía a estar a salvo de esta nueva oleada de contagios, el sector de las residencias ha vuelto a experimentar un repunte.

El temor a un rebrote en los geriátricos sigue siendo uno de los principales miedos. Por eso las autonomías han puesto en marcha medidas para endurecer las medidas: en Valencia, por ejemplo, las residencias vuelven a la fase 3 de desescalada. En Madrid se ha reforzado la seguridad y se hacen registros de visitas para limitar los contactos. 

8. Ámbito sanitario

El otro gran foco de la primera oleada fueron los sanitarios y, al estar en primera línea de la lucha contra el Coronavirus, siguen siendo uno de los principales sectores de riesgo durante esta nueva oleada de los rebrotes.

La situación ha cambiado, ya que se ha trabajado mucho en los centros sanitarios para separar circuitos Covid de no Covid. Sin embargo, muchos de los rebrotes de la nueva normalidad se han detectado en centros sanitarios, lo que pone en alerta a las autoridades, que no olvidan que España llegó a ser el país con más sanitarios contagiados del mundo.