Maria Teresa Cantarero Parlón, una joven de 27 años, desapareció el pasado domingo en la localidad madrileña de Rivas Vaciamadrid, en Madrid, una zona que se encuentra entre la Laguna del Campillo en el Parque Regional del Sureste.
Desde entonces y después de que su familia diese la alarma, la policía ha estado buscándola a través de un dispositivo de búsqueda y según han informado fuentes de la investigación, este jueves han encontrado su cadáver en el mismo sitio en el que desapareció.
A pesar de que Mayte, como todo el mundo la conocía, era natural de Córdoba, a finales del año anterior decidió mudarse a la capital española donde residen sus tíos para buscar trabajo allí.
«Solo se llevó el móvil, unos auriculares y el tabaco. Nunca se había fugado ni tenía motivos para ello. Además, siempre que iba a algún sitio le decía a su madre dónde no va a salir y siempre nos avisaba», contó su hermana a 'Europa Press'.
A este mismo medio le dijo que la joven había salido de casa a las 17 de la tarde del domingo 6 de septiembre y que desde entonces no habían tenido ninguna noticia de ella.
El teléfono de Mayte estuvo en funcionamiento hasta la una de la madrugada del lunes, a partir de aquel momento empezó a constar como apagado o fuera de cobertura.
Las primeras teorías
A pesar de que no se han compartido muchos más detalles sobre el hallazgo del cuerpo de la joven, las primeras hipótesis es que se habría suicidado, pero esto no se podrá confirmar hasta que salgan los resultados de la autopsia.
Mercedes Martín, la portavoz de la Guardia Civil, ha explicado que el cadáver de la joven ha sido encontrado «a varios kilómetros de distancia de donde aseguraron haberla visto por primera vez los testigos».