La Guardia Civil da por muerta a Wafaa y busca su cuerpo en Valencia. La joven de 19 años desapareció el 17 de noviembre de 2019. Un año y medio después, la investigación policial ha llevado a la detención de un hombre como presunto autor de su muerte.
Los agentes han detenido a David, un joven de 30 años con antecedentes por maltrato y tráfico de drogas. Además es compañero de fechorías de Jorge Ignacio, que está en la cárcel como presunto asesino de Marta Calvo y de otras dos chicas.
La Policía tiene indicios de que David mató a Wafaa e inmediatamente después hizo desaparecer su cuerpo. Ayer fue detenido en el municipio valenciano de Manuel. Aún no está acusado de asesinato, pero está siendo interrogado por los agentes.
Wafaa Sebbah, de origen argelino y vecina de Pobla Llarga, desapareció en Xàtiva hace 18 meses. Salió para encontrarse con un hombre mayor con el que tenía una extraña relación esporádica. De repente su móvil dejó de emitir señal, y nunca llegó a su destino.
Una investigación de 18 meses
Desde entonces, la Guardia Civil ha llevado a cabo una intensa investigación que parece haber dado resultados. Consiguieron estrechar el cerco sobre el sospechoso. Una amiga de la desaparecida puso a los agentes sobre la pista de David, alias «El Tuvi».
Ella misma les había presentado, y sospecha que David la secuestró y la mató poco después del asesinato de Marta Calvo. «Este tipejo era amigo y se juntaba habitualmente con el que está en la cárcel por matar a Marta», asegura.
Los investigadores tratan de esclarecer ahora la relación que mantenía David con Wafaa y si las sospechas pueden ser verdaderas. Quieren saber también si está relacionado con el encubrimiento de Jorge Ignacio, presunto asesino de Marta Calvo.
David habría acosado a la joven
El grupo de Homicidios de la Guardia Civil de Valencia lleva trabajando en el caso junto con el grupo de la Unidad Central Operativa (UCO) especializado en desaparecidos. Según sus indagaciones, David estuvo acosando a Wafaa para iniciar una relación sexual con ella.
La joven se negó y esto habría podido desencadenar el crimen. Pero obtener pruebas para incriminar al sospechoso no ha sido tarea fácil. La clave de todo estaba en el teléfono de la desaparecida, que emitió su última señal en el mismo lugar donde estaba el detenido.
Fue a las 6 de la tarde del 17 de noviembre de 2019, cuando se le perdió la pista. El móvil de Wafaa fue captado por un repetidor de Xàtiva. Hablaba con el hombre de 70 años con el que mantenía una relación personal.
La joven se dirigía a su casa en Carcaixent, donde vivía desde hacía dos meses. De pronto se le perdió la pista y nadie volvió a saber nada de ella. Pero unos días después alguien utilizó su teléfono para borrar varias fotografías de sus redes sociales.
La señal fue captada en un centro comercial de Carcaixent. La Guardia Civil ha estado revisando una y otra vez las cámaras de seguridad del centro. Allí podría estar el asesino de Wafaa, la pista clave para resolver este caso.
Antecedentes por violencia de género
David, alias «El Tuvi», cuenta con antecedentes por violencia de género hacia algunas de sus parejas. Ha sido detenido y trasladado al cuartel de Carcaixent. Allí también estuvo en su día Jorge Ignacio, su amigo y presunto asesino de Marta Calvo.
David y Jorge Ignacio son del mismo municipio, Manuel. De momento, el detenido no está colaborando con los investigadores. Pero estos cuentan con indicios suficientes como para presionarle y que acabe contando toda la verdad.
Según ha trascendido, los agentes tienen también información relevante que les podría llevar hasta el lugar del cadáver. Hoy mismo iniciarán el rastreo. Mientras, han requisado el coche del detenido, un BMW blanco, en busca de ADN de la joven.
136 crímenes sin resolver
La desaparición de Wafaa se enmarca en una sucesión de asesinatos y desapariciones en la Comunidad Valenciana. Entre ellos están los crímenes de 5 mujeres en poco espacio de tiempo. Se llegó a sospechar de la presencia de un asesino en serie.
Henry Alejandro desapareció el 1 de enero de 2019 en Orihuela. Luego vino la desaparición de Wafaa, y al año siguiente, en noviembre de 2020, la de Alicia Valera. Esta mujer de 45 años apareció muerta en una pedanía de Elche.
Poco después fue asesinada Florina, una chica rumana que ejercía la prostitución. La aparición de dos mujeres asesinadas más, Olga y Johana, hizo saltar todas las alarmas. En la región hay 136 crímenes sin resolver, y 411 desapariciones activas.