La gestión de Pedro Sánchez al frente del primer Gobierno de coalición de la historia reciente de España ha sido criticada prácticamente desde el primer día, pero todavía más después de la llegada de la pandemia de coronavirus.
Los partidos de la oposición, con el Partido Popular al frente, han cargado contra el presidente del Gobierno en numerosas ocasiones por provocar, según ellos, la emergencia sanitaria en España. Lo hicieron en marzo del año pasado, acusando al Ejecutivo de no prohibir las manifestaciones del 8-M, acusándole de priorizar la ideología a la salud.
También criticaron la gestión del Gobierno durante el primer estado de alarma, acusando a la formación de centralizar las competencias en la pandemia sanitaria, y le exigieron que devolviese las competencias a las comunidades.
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Una vez eso ocurrió, criticaron a Pedro Sánchez por no coger las riendas de la gestión y permitir que en España hubiera 17 formas distintas de combatir las distintas olas de coronavirus, una crítica que todavía sigue vigente hoy en día con las vistas puestas en la Semana Santa.
La última de esas críticas ha llegado, de nuevo, desde el PP, concretamente de parte del presidente de la Junta de Andalucía. Juanma Moreno ha acusado hoy al presidente del Gobierno de no dar «el cariño» y «el respaldo» necesario a Andalucía, la comunidad más poblada del país.
Moreno exige al Gobierno que sea «equitativo con los intereses de Andalucía», a quien ha acusado de ser arbitrario en su toma de decisiones y de repartir recursos sin criterios fijos, en referencia probablemente al número de vacunas y a la repartición de los fondos europeos para combatir la pandemia.
Por ese motivo, el presidente andaluz ha remarcado que «necesitamos un cambio» y que ese cambio debe venir liderado por Pablo Casado, el líder del PP. Moreno ha expuesto que «necesitamos un nuevo Gobierno, con un político joven, como es Pablo, con ganas, con ilusión, con proyecto por delante y dispuesto a poner el país donde nos lo merecemos todos los españoles».
Y también ha dejado claro que «vamos a trabajar, como lo hemos hecho siempre, con toda la fortaleza, con toda nuestra capacidad y talento para hacer posible ese cambio que a Andalucía también le vendría bien de la mano de Pablo Casado».
El PP, en tierra de nadie ante la subida de Vox
Las palabras de Juanma Moreno en el XIII Congreso Provincial del PP de Málaga se entienden como un intento de los líderes territoriales de apoyar y reforzar la figura de Pablo Casado, que en los últimos meses se ha visto cuestionada incluso desde dentro del partido.
El último golpe llegó el pasado 14 de febrero, tras las elecciones catalanas, ya que el PSC ganó las elecciones en Cataluña y el PP se quedó con únicamente 3 escaños, al borde de desaparecer del Parlament y superado ampliamente por Vox, que irrumpió en la cámara con 11 escaños, casi 4 veces más que los populares.
Precisamente es Vox quien más se ha aprovechado de la crisis del PP, ya que muchos creen que la indecisión de Casado a la hora de posicionar al partido ha favorecido a los de Abascal. En las comunidades en las que gobierna el Partido Popular, como Murcia o la propia Andalucía, lo hace con la ayuda de Vox, a quien necesitan para sacar todas las votaciones adelante.
Eso ha provocado que en muchas ocasiones, el PP se haya visto incluso chantajeado por Vox, obligándole a aceptar imposiciones a cambio de votar a favor de los Presupuestos o de otras leyes. En las últimas semanas, esta batalla se ha visto en Madrid, donde Vox pretende forzar al gobierno de Isabel Díaz Ayuso a introducir el llamado 'pin parental' a cambio de aprobar sus Presupuestos para el 2021.
Todo esto ha llevado a que desde el Partido Popular se esté intentando reforzar la imagen de Pablo Casado, en primer lugar para que Vox no acabe superándoles en próximas elecciones, como ha pasado en Cataluña, y en segundo lugar para convertirse en el líder claro de la oposición y convertirse en la alternativa al PSOE y las coaliciones de izquierdas.