Son muchos los sanitarios contagiados en España por Covid-19, concretamente más de 30.000 profesionales de la sanidad se han visto afectados por su trabajo continuado al frente de los enfermos. Sin embargo, a pesar de que han sido infectados mientras realizaban su labor, no se considera enfermedad profesional.
Así pues estos profesionales se les trata como a todos otorgándoles una baja laboral por enfermedad común aunque asimilable a un accidente laboral, lo que implica que no tendrán seguimiento si hay secuelas ni serán beneficiarios de las ventajas que se obtienen de ser calificada como enfermedad profesional.
Aunque los sindicatos y asociaciones de médicos han pedido que esta decisión sea modificada, el Gobierno se mantiene firme incumpliendo así la recomendación de la Organización Mundial de la Salud, que solicita a los países que traten a sus trabajadores sanitarios infectados como enfermedad profesional.
La OMS reconoce el duro y arriesgado trabajo de los sanitarios que luchan a diario contra el virus pidiendo un reconocimiento extra mientras que el Ministerio de Sanidad asegura estar estudiando la recomendación de la Organización y la petición de los profesionales sanitarios.
España es el país con más sanitarios contagiados por Covid-19, ya que han trabajado con materiales de protección deficientes e improvisados: «Los trabajadores sanitarios infectados por covid-19 por la exposición en el trabajo deberían tener los beneficios sociales de una enfermedad profesional, lo que incluye compensación, rehabilitación y tratamiento» opina la OMS.
Una opinión que no se comparte desde el Ministerio de Sanidad que ha decidido que estos profesionales sean tratados como el resto de la población infectada dándoles una baja por enfermedad común pero asimilable a un accidente de trabajo. La decisión radica en que afirman que no se puede comprobar que hayan sido contagiados en el lugar de trabajo.
La diferencia entre enfermedad común y profesional
«En las bajas, hay dos tipos de contingencia, común y laboral. Dentro de esta, puede ser accidente laboral o enfermedad profesional. En el accidente laboral empiezan los beneficios con la baja y terminan con el alta, y la causa es inmediata, como cuando alguien se cae y se lesiona. Pero la enfermedad profesional es prolongada en el tiempo y no termina con el alta, hay un seguimiento» explica Silvia Durán, coordinadora de delegados del sindicato Amyts.
Durán considera que las secuelas que puede dejar el contagio por coronavirus todavía no están muy claras y es necesario que se haga un seguimiento de los infectados durante un tiempo, algo que la calificación como enfermedad común no aporta.
Por su parte Comisiones Obreras también se han sumado a la petición de considerar a los sanitarios contagiados como enfermedad profesional: «Es el momento, dado el ingente número de contagios, de que el Gobierno, de una vez por todas, legisle que los contagios en el sector sanitario deben ser considerados accidente de trabajo, a todos los efectos, y evitar así un colapso de denuncias en los juzgados».
Seguridad Social sale al paso de estas opiniones defendiendo su postura con la idea de que en una pandemia el contagio se puede producir en cualquier sitio, con que no es posible determinar si los sanitarios se han contagiado en el lugar de trabajo. Además aseguran que los sanitarios están expuestos a enfermedades infecciosas, pero afirma que estudiarán las recomendaciones internacionales y las solicitudes de los profesionales.