El Pacto de Toledo que manifiesta que no habrá más recortes a las jubilaciones anticipadas con más de 40 años cotizados, ha vuelto a retomar sus negociaciones tras las vacaciones y lo ha hecho de forma confidencial.
Para que esté incluido en los próximos Presupuestos Generales, es necesario conseguir un acuerdo exprés de la reforma del sistema de pensiones.
Sin embargo, están llevando a cabo las negociaciones con tanto secretismo que ni siquiera han trascendido las dos primeras comparecencias celebradas los pasados miércoles día 2 y viernes 4 de septiembre.
Aunque según 'La Razón', fuentes cercanas a la negociación han informado que, sin aportar medidas drásticas, tanto el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, como la presidenta de la Airef, Cristina Herrera, han defendido que es necesario elevar la edad de jubilación y ampliar el cálculo del importe de la pensión a más años.
Asimismo, también han expresado que es necesario compensar la tasa de dependencia, equilibrar la tasa de reposición o reordenar los planes de pensiones privadas.
A pesar de que los acuerdos están prácticamente cerrados, todavía tienen sobre la mesa asuntos como el aumento de la edad jubilación, la extensión del período de cálculo de las pensiones o el aumento de la penalización por jubilación anticipada.
Las personas con jubilación anticipada pierde entre un 6,5 y un 8% anuales de su pensión
Después de que muchos jubilados denunciaran que llegaron a perder hasta un 8% de pensión al año por demandar la jubilación anticipada aunque ya disponían de 40 años o más cotizados, esta cuestión todavía está pendiente de llegar a un acuerdo.
José Luis Escrivá, el Ministro de Seguridad Social, por su parte, mostró ya hace tiempo su disposición a corregir esta situación que considera «intrínsecamente injusta». Pero sí que se mantiene firme respecto a la idea de alargar la edad de jubilación, a 67 años, y evitar en la medida posible ofrecer jubilación anticipada.
En aquellos casos en los que se acreditaba un período de cotización inferior a 38 años y 6 meses, se aplicó un coeficiente reductor máximo del 2% por trimestre. Para las personas que tenían una cotización igual o superior a 38 años y 6 meses a 41 años y 6 meses, se situó en 1,785% por trimestre.
Esto supone que la diferencia de pensiones respecto a aquellos que solicitaron la jubilación anticipada de los que no esté entre el 1,6% y el 2% por trimestre, lo que equivale a una pérdida de entre un 6,5% y un 8% al año.