Una niña de 9 años está ingresada en el hospital de Son Espases de Mallorca tras ser disparada con una escopeta en la frente. Su hermano, de 7 años, le disparó en la frente con una escopeta de perdigones que su padre había dejado cargada. La menor se encuentra ingresada en estos momentos en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y en estado crítico.
Según ha informado la Guardia Civil, todo ocurrió sobre las ocho de la tarde del miércoles, 28 de julio. El padre había estado disparando su escopeta de perdigones durante la tarde. Al parecer, cometió un descuido y se la dejó cargada dentro del domicilio.
Los dos niños estaban jugando cuando el padre, de repente, escuchó un fuerte grito de su hija de 9 años. Según fuentes policiales, el pequeño habría cogido la escopeta cargada de su padre y le disparó a su hermana en la frente como un juego.
El padre avisó rápidamente a los servicios de emergencia, que mandaron una UVI Móvil y varios sanitarios hasta el domicilio. La niña presentaba una herida por arma de fuego en la frente por el disparo, que fue realizado desde una distancia corta.
Los sanitarios entubaron a la niña y lograron estabilizarla. Después la trasladaron de urgencia al hospital de Son Espases. Allí quedó ingresada en la UCI Pediátrica y en estado crítico.
La Guardia Civil, que se ha hecho cargo de la investigación, ha abierto diligencias para esclarecer cómo ocurrieron los hechos. De momento, las primeras investigaciones han determinado que el disparo del hermano fue accidental.
Aun así, habrá que esperar a que avance la investigación para ver si se le pueden reclamar responsabilidades al padre. Fue él quien dejó la escopeta cargada en el domicilio, aunque por error.
Herida una menor por un disparo de perdigón en el patio de su colegio
Curiosamente, el de Llucmajor no es el único caso similar sucedido en España en los últimos meses. El pasado mes de marzo, una niña de entre tres y cuatro años de edad resultó herida por el mismo motivo en un colegio.
Los hechos ocurrieron, concretamente, en el Colegio San José de la localidad de Reinosa, en Cantabria. La niña se encontraba jugando en el patio del colegio cuando fue alcanzada por un disparo realizado con una escopeta de perdigones.
En este caso, las autoridades desconocían la procedencia del disparo cuando se inició la investigación. Varios meses después, no han trascendido los detalles exactos de este suceso que dejó a la menor herida en un tobillo.
Afortunadamente, la pequeña fue operada en el Hospital Universitario Marqués de Valdecilla y quedó fuera de peligro. La Guardia Civil asumió la investigación y se desplazó al colegio para esclarecer las circunstancias del suceso.
La dirección del colegio, ante la preocupación de la mayoría de padres, quiso enviar un comunicado pidiendo "tranquilidad". "Desde que se produjo dicho incidente, el Colegio ha articulado todos los mecanismos que están a su alcance para esclarecer lo ocurrido", aseguraron.
"Son los organismos competentes los que están llevando a cabo la correspondiente investigación", matizó la dirección. Además, añadieron que el colegio siguió "las recomendaciones de las autoridades intervinientes" en todo momento.
El colegio no informó de lo ocurrido durante el mismo día para no entorpecer las investigaciones. "Pero una vez publicado en medios de comunicación, consideramos oportuno y necesario informaros como familias del centro", concluyeron.
Finalmente agradecieron la comprensión de los familiares y el trabajo de las fuerzas del orden para esclarecer los hechos. A día de hoy se desconoce exactamente qué pudo ocurrir o desde dónde se produjo el disparo que dejó a la niña herida.