Un trágico accidente de tráfico la pasada noche en Murcia se ha cobrado la vida de un matrimonio y un bebé. El siniestro se ha producido por la colisión entre dos vehículos, y hay dos heridos en estado crítico. Los tres fallecidos y los dos heridos críticos son miembros de una misma familia.
La colisión mortal acontecía pasadas las diez de la noche en la AP-7, dirección Cartagena. La Guardia Civil está investigando las circunstancias de la que ya es una de las peores tragedias en la carretera este 2022. Unos jóvenes habrían embestido el turismo donde viajaban los cinco miembros de una misma familia.
Los dos vehículos implicados circulaban en la misma dirección, y uno habría impactado con el otro por detrás. En el coche de delante viajaban un matrimonio, un bebé de trece meses y dos niños de 8 y 11 años. En el coche que venía por detrás iban tres adolescentes que al parecer iban de fiesta.
Cómo se ha producido el siniestro
Según informa El Español, “los dos vehículos iban en dirección a Cartagena y parece ser que la colisión ha sido por alcance”. Están investigando si se produjo al cambiar de carril, por invadir uno de los dos viales o por no respetar la distancia de seguridad. El coche que iba delante se llevó la peor parte.
El accidente tuvo lugar en el kilómetro 787 de la Autopista del Mediterráneo, sobre las 22:20 horas. En un Seat Ibiza viajaban los cinco miembros de una familia marroquí: el padre, la madre y tres menores. En el Renault Megane iban tres adolescentes que supuestamente habían salido de fiesta.
El Renault se empotró por detrás contra el Seat que conducía el cabeza de familia, un hombre de 43 años, junto a su mujer, de 35. En los asientos traseros iba un bebé de 13 meses, y sus dos hermanos de 8 y 11 años. El padre, la madre y el bebé perdieron la vida, y los niños están entre la vida y la muerte.
Una escena dantesca
Varias llamadas alertaron a Emergencias del accidente y se movilizaron efectivos de Policía Local, Bomberos y Protección Civil. Varios efectivos de Los Alcázares, San Javier y San Pedro del Pinatar acudieron como apoyo ante “un grave accidente”. Inicialmente se informó de fallecidos y heridos atrapados.
“Una colisión por alcance del vehículo Renault Megane, el cual impacta con resultados fatales contra un Seat Ibiza”, afirma el atestado. Guardia Civil de Tráfico creó un perímetro de seguridad para facilitar las labores de rescate. Los Bomberos tuvieron que excarcelar a los padres y a los menores del amasijo de hierros.
Fuentes policiales aseguran en El Español: “Vaya escena, el Renault Megane había metido el culo del Seat Ibiza hasta los asientos delanteros”. El choque fue tan brutal que las tres víctimas mortales murieron en el acto. Dos menores pudieron ser rescatados con vida, aunque su situación es muy grave.
Dos horas para liberarlos
Además, efectivos sanitarios aseguran que la silla donde viajaba el bebé “estaba por debajo de uno de los asientos delanteros”. “Cuando un bombero metió la mano estaba aplastado”, añaden, como reflejo de la dureza de la escena. Los profesionales que trabajaron en el accidente tardarán tiempo a olvidarlo.
“Fue un servicio muy duro, el niño de 11 años que sobrevivió estaba en estado de shock tras la colisión”, explican. De hecho, cuando llegaron los servicios de emergencia lo encontraron abrazado al reposacabezas de su madre ya fallecida. Necesitaron dos horas para liberar a los dos supervivientes.
El menor fue trasladado al hospital en estado crítico con una lesión medular, neumotórax y un traumatismo craneoencefálico. El mayor presentaba fractura de pelvis y fémur, con un mejor pronóstico. Los dos están luchando por salir adelante, y según informan el niño de 8 años ha entrado en coma.
Los tres jóvenes del otro coche
Los tres ocupantes del otro vehículo son jóvenes de origen sudamericano y nacionalidad española. Tienen 18, 20 y 21 años, resultaron heridos leves y no eran conscientes de lo que había sucedido. “Uno de ellos dijo literalmente que habían colisionado contra el coche porque iban volando”, afirma un sanitario.
La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación y ha realizado las pruebas para comprobar si el conductor conducía bebido o drogado. Todos los miembros de la misma familia llevaban el cinturón de seguridad. El Seat iba a una velocidad normal, mientras que el Renault iba más rápido.
Esto habría provocado el choque mortal, ya que según los jóvenes iban tan rápido que no vieron al coche que tenían delante. El Seat Ibiza era de color oscuro y la oscuridad de la noche habría provocado que no lo vieron hasta que fue demasiado tarde. El suceso ha conmocionado a la comunidad marroquí de Murcia.