La súbita irrupción de la pandemia de coronavirus en marzo de 2020 supuso un tremendo varapalo en muchos sentidos. En primer lugar, por supuesto, el sanitario: millones de personas se infectaron por covid-19, de las cuales decenas de miles tuvieron que ser hospitalizadas, incluso en las UCIs, y miles de ellas acabaron, desgraciadamente, falleciendo. Pero la crisis sanitaria, que aún se arrastra a la espera de que la vacunación mitigue sus efectos, acarreó también una doble crisis que azota nuestro país desde entonces: una gran depresión económica, social y laboral, que ha vuelto a hundir a España en un momento en el que aún no se había recuperado al completo de la anterior crisis económica, que estalló en 2008.
Un crecimiento menor de lo esperado en España en 2021
Analizada la situación económica actual en nuestro país, la conclusión a la que se llega es muy clara: España se encuentra inmersa en una notable crisis económica. La gran incógnita es ahora saber cuánto tiempo va a tardar en producirse la esperada recuperación. En 2020, el impacto de la pandemia se notó, y de qué forma, en la evolución económica de nuestro país, que cayó de forma histórica: más de un 11%. Tras tal debacle, en 2021 todas las previsiones son de crecimiento, pero ninguna de ellas contemplaba, en el arranque del año, recuperar los once puntos perdidos en el ejercicio anterior.
De hecho, la previsión más optimista era la del propio Ministerio de Economía, que auguraba una crecida del 9,8% de la economía española solo en el caso de que llegaran los fondos europeos en la magnitud en la que estaba prevista. Se prevé que este mismo viernes, el Ejecutivo actualice sus propias previsiones y que lo haga a la baja: el ministerio dirigido por Nadia Calviño podría situar el índice de previsión en el 6,4% de crecimiento. De esta forma, 'compraría' el pronóstico hecho por el Fondo Monetario Internacional (FMI) que situaba en este punto a la economía española para este 2021, por encima del 6% previsto por el Banco de España, el 5,7% de la OCDE y el 5,6% de la Comisión Europea.
La salida de la crisis, aún lejos
En base a estos datos, los expertos en materia económica ven todavía lejana la recuperación de España y su salida de esta segunda crisis económica en doce años. De esta forma, auguran que nuestro país va a recuperar los niveles económicos previos a la crisis, como muy pronto, en 2023. Esta es la fecha que se preveía ya hace meses, con las anteriores previsiones económicas —más optimistas—, de forma que fácilmente se va a retrasar esta meta hasta los ejercicios 2024 o 2025. De hecho, los mismos expertos señalan que no será hasta 2026 cuando España pueda normalizar su elevado déficit y situarse en niveles estándard, dejando de ser, como sí lo es a día de hoy, el país de nuestro enterno con un déficit más elevado.
Son varios los expertos que señalan este viernes, 9 de abril, en '20 Minutos', que España deberá adoptar en los próximos años medidas restrictivas para menguar rápidamente el crecimiento del déficit. Las mismas voces apuntan que la economía española adolece de varios defectos estructurales que le impiden una correcta y veloz recuperación tras la crisis. De entrada, cabe señalar la rigidez del mercado laboral a la que se refieren los expertos y que el ministerio de Trabajo y Economía Social de Yolanda Díaz pretende reformar en los próximos meses —ya han arrancado las reuniones con sindicatos y patronales para tirar adelante esta cuestión. El problema endémico de España con sus elevados índices de desempleo es otro de los factores que contribuye a relentizar la salida de la crisis de nuestro país.
La reforma del mercado laboral en nuestro país, pues, se antoja clave para acelerar o frenar la salida de la situación de depresión económica en la que se encuentra España. Medidas como la apuesta por el contrato único eliminando el de carácter temporal pueden revestir una vital importancia al asegurar el empleo y fomentar un mayor consumo dada la seguridad económica de que gozarán los trabajadores. Otras voces apuntan también a reformas estructurales de mucho mayor calado y dificultad en su aplicación práctica: cambiar el sistema productivo en nuestro país para que la economía dependa mucho menos del turismo, combinando esta medida con el fomento de una política industrial activa.
En definitiva, pues, los expertos dejan claro que la crisis económica por la que ya transcurre nuestro país ha venido para quedarse y que va para largo. Si bien es cierto que, hoy por hoy, todavía señalan al año 2023 como el ejercicio que podría conllevar la salida de la depresión económica en España, la rebaja de las previsiones a corto plazo podría hacer que en los próximos meses se retrase esta meta. La pandemia ha sumido a España en una nueva crisis y, de nuevo, costará años salir de ella.