Un hombre mató el pasado viernes por la noche a un vecino suyo, jubilado de 70 años, de varias puñaladas en un bloque de viviendas en Las Palmas de Gran Canaria. Concretamente, el suceso tuvo lugar en un edificio de la calle Córdoba del barrio de San Cristóbal.
Los vecinos están asombrados ante la brutalidad del crimen, pues el autor del asesinato se ensañó con la víctima asestándole varias decenas de puñaladas. Tras tal salvaje agresión, el atacante de 51 años se fue tranquilamente a dormir, según explica el diario 'La Provincia'. También se han visto sorprendidos de este asesinato, pues no conocían ningún tipo de conflicto de los dos, el fallecido, Federico, era muy tranquilo e incluso había ayudado a su homicida en más de una ocasión.
Dos versiones sobre los hechos
La detención del autor de los hechos tuvo lugar el pasado sábado a manos de la Policía Nacional. Agentes aún mantenían acordonada la puerta de la vivienda de la víctima este lunes.
Horas antes, durante el domingo, se había hecho la reconstrucción de los hechos con el detenido. Hasta cinco vecinos coinciden que Federico había bajado sobre las 11 de la noche a bajar la basura, alguno explica que dejó la llave puesta en el exterior. Minutos después, bajaría su asesino y le clavaría un punzón y lo acabaría rematando «con más de 60 puñaladas». Muchos vecinos reconocen que no escucharon mucho ruido y que solo se enteraron cuando la policía llevo a cabo la detención mientras el asesino dormía.
Por su parte, un amigo del arrestado explica que Pepe, el autor de los hechos, había bebido alcohol y volvía de fiesta. Habría sido a las 6 de la mañana cuando llamó al timbre para pedir dos euros a su vecino. Fue al segundo intento cuando Federico le abrió y le cosió a puñaladas.
Pepe acaba de salir de prisión por motivos que no han trascendido. Esa noche, según la versión del amigo, «le dijo a su hermano que lo mató, y se acostó a dormir». Confirma que la detención se produjo cuando estaba aún en la cama. Está previsto que hoy sea llevado ante el juez