Las nuevas cepas del coronavirus están suponiendo un reto a mayores para controlar la pandemia durante esta tercera ola de contagios.
Mientras la campaña de vacunación avanza a un ritmo insuficiente para frenar el avance del virus, la existencia de nuevas variantes más contagiosas del virus están poniendo en cuestión la eficacia de las vacunas, que podrían no generar una inmunidad completa ante estas nuevas cepas.
Por esta razón, se antoja fundamental actual con celeridad para identificar e aislar estos nuevos casos y evitar su propagación.
El lugar por donde entran las nuevas cepas de coronavirus a España
Para evitar que la propagación de las nuevas cepas del virus se descontrole es importante localizar el lugar por donde están entrando estas nuevas variantes del virus que ya han sido identificadas en varios países del mundo.
No solo hablamos de la conocida como cepa británica, una variante del virus que ha demostrado ser un 70% más infecciosa que otras y que ya se ha extendido por varias comunidades autónomas de España. Incluso en nuestro país tenemos el caso de un pueblo donde la cepa está completamente descontrolada.
También hablamos de las nuevas cepas que han sido identificadas en las últimas semanas. Hablamos de la variante surafricana, que se ha identificado ya en 22 países, pero también de la nueva cepa brasileña que ha sido identificada en Japón.
Esta última está generando una gran preocupación mundial por una de sus mutaciones, la «E484K», que podría «escapar» a los efectos de la inmunización de las vacunas actualmente desarrolladas.
Como cabría esperar, estas cepas ya están circulando por numerosos países a través de viajeros que recorren el mundo y esparcen el virus ante la falta de controles fronterizos.
En ese sentido, los aeropuertos se han convertido en los lugares por donde entran las nuevas cepas de coronavirus y, por tanto, la necesidad de aumentar el control en estos espacios se ha hecho cada día más latente.
Madrid pide cerrar espacios aéreos y más control en los aeropuertos
Por esta razón, algunos expertos y dirigentes políticos consideran crucial reforzar el control en los aeropuertos para evitar la entrada de las nuevas cepas.
Es el caso de la Comunidad de Madrid, que a través de una carta remitida por la presidenta, Isabel Díaz Ayuso, y por el consejero de Sanidad de la región, Enrique Ruiz Escudero, ha pedido al Ejecutivo central que prohíba la entrada de vuelos procedentes de Sudáfrica y Brasil.
Según señala 'La Razón', la carta dirigida al ministro de Salud, Salvador Illa, pide «extremar las medidas de control en el aeropuerto y la cancelación de vuelos con estos países, hasta esclarecer, al menos, la situación y las características de estas nuevas cepas».
De esta forma, el gobierno madrileño pide que no se cometa el mismo error que se cometió cuando apareció la cepa británica y se tardó dos días en tomar la decisión de cerrar el espacio aéreo con Reino Unido.
En tan solo dos días, el 19 y 21 de diciembre, llegaron a Madrid 480 vuelos procedentes de este país, una situación que con toda seguridad contribuyó a que actualmente haya en España 88 casos confirmados de la cepa británica y 200 en investigación.
Algo similar está sucediendo tras descubrirse las nuevas cepas de Sudáfrica y Brasil. Del país latinoamericano han llegado más de 50 vuelos a la capital española en el último mes, mientras que de Sudáfrica hace tres semanas que no entra ningún vuelo, según ha informado Fernando Simón.
El escaso flujo aéreo procedente de estos países, unido a que estos viajeros ya tienen la obligación de entrar en España con una PCR negativa realizada en las últimas 72 horas, ha hecho que el Gobierno no se plantee, por el momento, reforzar el control aéreo pidiendo una prueba a la llegada o exigiendo cuarentenas.
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