Joao Maleck, futbolista profesional que juega en las categorías inferiores del Sevilla, es noticia tras haber protagonizado una acción que va a arrastrar toda su vida. En un accidente de tráfico que ha ocasionado el joven, han fallecido las dos personas que iban dentro del vehículo colisionado. El accidente tuvo lugar en la noche del sábado al domingo.
A causa del exceso de alcohol y del exceso de velocidad al volante, ha golpeado violentamente por detrás a un coche color plateado en Guadalajara, México. Desgraciadamente las víctimas han fallecido a causa del impacto y se conoce que se trataba de una pareja de recién casados. Por lo que se conoce, el jugador iba a 160 km/h. Él pudo salir por su propio pie y fue detenido inmediatamente. La Fiscalía ya se ha hecho cargo del caso.
El alcalde de Zapopan, la localidad en la que sucedido el suceso, ha condenado el suceso y ha pedido a la Justicia que sea rigurosa:
Alejandro y María Fernanda, una joven pareja de 26 y 33
Los dos fallecidos, según recogía 'El Español', eran Alejandro y María Fernanda, dos jóvenes mexicanos, residentes en Guadalajara, que acaban de celebrar el día más feliz de sus vidas rodeados de su familia. Él, de 33 años, era padre de dos hijos trabajaba en la empresa Global Gas como 'director de desarrollo organizacional'. Ella, de 26, era licenciada en Ciencias de la Comunicación.
Los dos habían iniciado su historia de amor hace unos dos años cuando se conocieron en la compañía Sello Rojo. Allí María Fernanda había empezado su trayectoria profesional como becaria. Una vez se incorporó Alejandro, de quién sus compañeros decían que «siempre tiene una sonrisa para todos», no tardaron mucho en iniciar una gran historia de amor.
Este 23 de junio tenía que ser su gran día. Hacía meses que tenían preparado un gran convite y una celebración que se iniciaría el sábado con una gran boda en la iglesia, continuaría con una boda civil el sábado y culminaría en una gran fiesta este lunes.
El padre localizó el coche de la pareja
El domingo por la mañana nada hacía presagiar que sus planes se pudieran ver truncados de tal trágica manera. Los dos se dirigían sobre las nueve de la mañana a una cita con una maquilladora, previa a un sesión de fotos. Era el último paso antes de iniciar su fiesta a las tres de la tarde. La fatalidad quisó que en el camino de su Aveo gris se cruzará el Mustang blanco del jugador sevillista.
La alarma saltó entre la familia cuando la maquilladora llamó a los padres de ella comunicándoles que no habían acudido. Entonces, el padre de la joven decidió recorrer el posible trazado que habría hecho la pareja y localizó a los dos vehículos en el suburbio de Zapopan. No tardó mucho en identificar la matrícula del coche gris como la de su yerno Alejandro. Por el shock, llamó a un primo de María Fernanda que fue quien confirmó la identidad de los cadáveres.