Han pasado siete años, pero para los amigos, compañeros y familiares de Eusebio García Flores parece que fue ayer. El 8 de junio de 2014, el guardia civil murió mientras formaba parte del dispositivo de seguridad de La Vuelta Ciclista a España. Este año, los suyos han querido rendirle un sentido homenaje.
Este año es el primero en el que La Vuelta pasa por Albacete desde que murió Eusebio. Por eso sus amigos y familiares han revivido con especial intensidad la tragedia de hace siete años. Le recuerdan como un compañero excepcional, un gran padre de familia y una persona comprometida con su trabajo.
Además del recuerdo especial que han tenido hacia el fallecido, la Asociación Unificada de Guardias Civiles de Albacete le homenajea cada año. Lo hacen con el Certamen de Fotografía que lleva su nombre, y que sirve para reconocer a todos los uniformados. Eusebio se ha convertido pues en todo un referente en su tierra.
El hecho que trágico que marcó su final tuvo lugar durante la Vuelta Ciclista a España de 2014. Eusebio formaba parte de la Unidad de Movilidad y Seguridad Vial y falleció al salirse de la carretera. Fue en el descenso del puerto de la Cobertoira, en Asturas. El impacto fue brutal y murió en el acto.
Se salió de la vía en un tramo recto
El accidente se produjo a las tres de la tarde, dos horas antes de finalizar la etapa reina. De hecho, muchos de los participantes no se enteraron de la triste noticia hasta llegar a la meta. La muerte del guardia civil causó una gran consternación en el cuerpo armado y en la organización de la competición.
El siniestro se produjo en un tramo recto sin aparentes complicaciones, hecho por el cual se abrió una investigación. Otros motoristas de la Guardia Civil y equipos de emergencia fueron los primeros en auxiliar al accidental. Pero Eusebio ya estaba muerto y no pudieron hacer nada para ayudarle.
Eusebio tenía 41 años y era un experimentado conductor que se había sacado la licencia de motorista de la Guardia Civil en 2001. "Era el segundo año que Eusebio García formaba parte de la unidad cuando se produjo el accidente", recuerda el teniente Javier Baraja, "sufrió una salida de la vía con fatal desenlace".
Cada año recuerdan a Eusebio García
Eusebio murió en la decimosexta etapa de la Vuelta Ciclista, que partió de San Martín del Rey Aurelio y recorrió 160 kilómetros hasta el puerto de la Farrapona. Él integraba el grupo de motoristas encargados de abrir camino al pelotón, en una de las competiciones más populares del país.
Para velar por la seguridad de la prueba, la Guardia Civil despliega en La Vuelta un contingente de 128 agentes. Entre ellos hay miembros de la unidad de Tráfico, motoristas y unidades de reserva. Su tarea es garantizar la seguridad de los participantes durante las 21 etapas del circuito.
"El año pasado rendimos un sentido homenaje a nuestro compañero porque La Vuelta volvió a pasar por el mismo sitio donde falleció", explica la Guardia Civil. Este año, con motivo del paso de La Vuelta por Albacete, querían dedicarle un acto especial. "Queremos entregar algún detalle a sus familiares", dijeron.
Ayer miércoles, en la calle Vicente Aleixandre de Albacete, compañeros de Eusebio García Flores volvieron a recordar al compañero que nadie puede olvidar. Fue en el mismo lugar donde ejerció durante años como guardia civil. Y en la misma competición donde dejó su vida, aunque a cientos de kilómetros de distancia.
El mismo año que murió, los ciclistas de La Vuelta quisieron tener un gesto hacia el guardia civil fallecido. Donaron los premios de la 16 etapa a la viuda de Eusebio García, fallecido durante el recorrido. Esta donación se realizó a través de la Asociación de Ciclistas Profesionales (ACP).