El viernes de la semana pasada, Manuel Díaz Angulo salió de su casa para hospedarse en un hotel de Lanjarón (Granada) durante unos días. Al día siguiente salió con el coche y le perdieron el rastro. La Guardia Civil ha encontrado esta mañana su cuerpo sin vida, horas después de que encontraran su coche.
Se trata de una zona agreste de montaña a la altura del kilómetro 5 de la carretera que une Órgiva con Vélez de Benaudalla. La zona se encuentra cerca del pantano de Rules, donde ayer por la tarde encontraron el coche de Manuel. Esta mañana han encontrado el cadáver en una zona cercana.
Manuel Díaz Angulo tenía 44 años y su desaparición causó extrañeza en el entorno porque aparentemente no tenía problemas. Desde el sábado hasta hoy, un amplio dispositivo de la Guardia Civil le ha estado buscando en la zona donde desapareció. Hoy se ha confirmado el triste final, y ahora tratan de encontrar una explicación.
Dejó sus cosas en el hotel
Manuel Díaz Angulo nació en Jerez de la Frontera hace 44 años, y se había ido el fin de semana a Lanjarón para pasar unos días. El sábado 12 de marzo salió con su coche, un Citröen C3 blanco, para aparentemente dar una vuelta. En el hotel donde se hospedaba dejó sus pertenencias, y desapareció.
Sus familiares no podían contactar con él, y su hermano presentó una denuncia por su extraña desaparición. Patrullas de seguridad ciudadana y especialistas de la Guardia Civil participaron en las labores de búsqueda y rescate. Siempre trabajaron con la hipótesis de que no podía estar demasiado lejos.
Su desaparición había causado mucha extrañeza en sus familiares, ya que en principio no tenía problemas y se comunicaba con ellos a diario. Durante todo el sábado estuvieron intentando ponerse en contacto con él, pero su teléfono estaba fuera de servicio. Fue entonces cuando saltaron todas las alarmas.
Llevaban horas sin saber de él
Sus familiares denunciaron la desaparición el domingo por la mañana, varias horas después de no tener noticias de él. Manuel se había desplazado a Lanjarón con su coche, el mismo con el que salió del hotel el día que desapareció. Todos los días hablaba con su madre, pero ese día dejó de estar disponible.
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Su hermano se desplazó en persona hasta el lugar donde se alojaba, y comprobó que Manuel no estaba allí pero sí sus pertenencias. La policía organizó un dispositivo de búsqueda al que se sumaron voluntarios de Lanjarón y varios cuerpos policiales. La entidad SOS Desaparecidos compartió una foto suya.
La Policía Nacional no escatimó recursos y una unidad se desplazó desde Madrid para trabajar en la geolocalización del teléfono móvil. El teléfono siguió emitiendo señal durante dos días, hasta que se perdió este pasado martes. Los agentes acotaron el perímetro de búsqueda, hasta acercarse al cuerpo.
Investigan las circunstancias
Ayer por la tarde encontraron el coche blanco en la mencionada zona agreste cerca del pantano. Los agentes intensificaron la búsqueda ante la certeza de que el desaparecido se encontraba cerca del vehículo. Esta mañana, al reanudar las labores de búsqueda, han hallado el cuerpo sin vida del andaluz.
La policía investiga ahora las circunstancias en las que pudo haber muerto este jerezano, y de momento no descartan ninguna hipótesis. Tratan de esclarecer si se trata de una muerte accidental o si pudo haber cometido un suicidio. La noticia ha causado una gran consternación en el entorno, que mantenían la esperanza de hallarlo vivo.
Fuentes policiales afirmaron que no habían encontrado restos de sangre ni de violencia en el coche de la víctima. Tampoco en el teléfono móvil, que apareció junto al coche y con el que estaban revisando su historial de llamadas y mensajes. Manuel vivía en la zona de Picadueñas y estaba muy vinculado con el fútbol local.