Una vez ya pasadas las dos primeras grandes fechas de las fiestas navideñas, la duda que tenían muchos ciudadanos españoles es como podrían despedir el año. Las diferentes comunidades han ido anunciando algunos cambios en las restricciones de cara a la próxima Nochevieja, la última de ellas ha sido la de Galicia.
El gobierno que preside Alberto Núñez Feijóo anunciaba, a través de su comité clínico, cuáles eran los detalles de las restricciones de cara a la última noche del año. La más importante era que se mantiene el permiso para la movilidad para encuentros familiares. Eso sí, se acota a un período concreto de tiempo. Se restringe esta circulación entre las 00:00 horas del 30 de diciembre a las 23:00 horas del 1 de enero. Fuera de este período, Galicia seguirá cerrada perimetralmente, así como aquellos concellos que no estén en el límite básico de restricciones.
También se ha anunciado que el toque de queda nocturno queda ampliado durante la noche del 31 de diciembre al 1 de enero a la una y media de la madrugada. Otro dato importante tiene que ver con el número de personas que se podrán reunir durante estos días. Sanidade ha hecho una recomendación de que se intente que las diez personas que se junten sean de la misma burbuja. De no ser así se pide que se intente limitar a dos grupos familiares o como tercera opción que en más de dos grupos haya un máximo de 6 adultos y 4 niños menores de 10 años.
El gobierno gallego también ha anunciado pequeños cambios en los horarios de obertura de los bares y restaurantes durante Nochevieja y el día de Año Nuevo. Por un lado en aquellos municipios donde existe un nivel más alto de restricciones se alarga una hora el cierre. Así ya no será a las cinco de la tarde sino a las seis, medida que se podría extender pasado ese día y las fiestas. En los concellos abiertos el límite horario será hasta las once de la noche. Para el 1 de enero, todos los bares y restaurantes no podrán abrir hasta la una de la mañana y no a primera hora.
Cambios en los niveles de restricciones de diversas poblaciones
Mientras se confirmaba este anuncio específico para el final de año, el comité clínico ya había acordado este lunes por la noche restringir más la movilidad en un nuevo grupo de municipios gallegos. Hasta siete nuevos pasan al nivel más alto de restricciones: Viveiro, Verín, Monterrei , Castrelo do Val, Cualedro, Noia y Lousame.
Ello supone la prohibición de salir de su territorio salvo las excepciones habituales y las concretas por Navidad. Eso sí Verín, Monterrei, Castrelo do Val y Cualedro forman un perímetro conjunto, al igual que Noia y Lousame. Además las reuniones tienen que ser de un máximo de 4 personas no convivientes y la restauración solo abre en terrazas y al 50%.
Otros municipios pasan al nivel medio-alto de restricciones: Redondela, Barro, Xinzo de Limia, Carral, Xove, Muros, Outes, Porto do Son y A Pobra do Caramiñal. Tienen las mismas restricciones que en el nivel alto salvo la posibilidad de abrir un 30% el interior de bares y restaurantes además de las terrazas. Redondela pasa formar parte de la zona perimetral de Vigo.
En el lado contrario, varias poblaciones dejarán de estar cerradas perimetralmente y pasan al nivel más básico de restricciones. Se trata de la ciudad de Lugo además de las concellos de Ponteareas y Rodeiro. Así de las 7 grandes ciudades gallegas, solo Pontevedra y Ourense no permanecerán cerradas.