Gabriel Pardo, vecino de Mieres (Asturias), ha sido encontrado sin vida esta mañana en una escombrera. Había desaparecido 24 horas antes. Un operario de las torres de alta tensión ha divisado su cuerpo a escasos metros de la moto en la que viajaba.
Gabriel era aficionado al motocross desde pequeño. Ayer, como muchas otras tardes, salió a dar una vuelta con su moto. Pero a diferencia de otras veces no volvió a casa ni se puso en contacto con sus familiares, que empezaron a buscarle.
Sus compañeros estuvieron buscándole toda la noche por las rutas que solía hacer. El rastreo ha seguido durante la mañana, hasta que a las diez lo han encontrado. Ha sido en la escombrera de Figaredo, gracias al avistamiento de un operario.
Este trabajador ha divisado una moto de enduro Gas Gas como la que llevaba él. Se ha puesto en contacto con Guardia Civil y Bomberos, que se han desplazado hasta el lugar. Cerca estaba el cuerpo de Gabriel, sin vida y sin aparentes signos de violencia.
Todo apunta a que podría haber sufrido una indisposición, aunque aún es pronto para decirlo. La autopsia determinará exactamente de qué murió. No se descarta que haya podido tener un accidente, pero no es la principal hipótesis ya que fue encontrado con los guantes quitados.
Un chico muy amable y trabajador
La víctima, cuya edad no ha sido revelada, trabajaba como repartidor de fruta. Provenía de una familia relacionada con la actividad comercial. Su muerte ha causado una gran consternación en su entorno familiar, pero también entre sus compañeros.
Tras conocer el trágico desenlace, quienes le conocían bien han destacado su carácter amable y su espíritu de trabajo. “Era un joven muy atento, metódico y tremendamente trabajador”, ha dicho uno de sus conocidos a La Nueva España.
Sus allegados mantuvieron hasta el final la esperanza de encontrarlo con vida. Ellos, junto con la Guardia Civil y los Bomberos, buscaron a Gabriel durante toda la noche. Había salido el domingo al mediodía, por la zona alta del valle de Turón.
Según las primeras informaciones, Gabriel salió con un traje de color blanco, rojo y negro. Su móvil estaba parado desde las tres de la tarde y no emitía señal. Acotaron la zona de búsqueda a partir de las rutas que solía hacer cuando salía con la moto.
Siempre solía mantener el contacto con sus familiares o con un amigo, pero ayer de pronto dejó de emitir señal. Esto dejó a sus allegados muy preocupados. Pidieron la colaboración ciudadana, por si algún vecino lo había visto por la zona y saber dónde podían buscarlo.
Horas después, tras no dar señales de vida, se pusieron en marcha para encontrarle. Junto a las tareas de rastreo se hizo un llamamiento a través de redes sociales. Finalmente no ha podido ser, y el cuerpo sin vida ha sido hallado cerca de la escombrera.
Buscan a un joven de 29 años en un pantano
Otro joven ha desaparecido en España en las últimas horas. Se trata de un varón de 29 años que se lanzó al pantano de Siurana (Tarragona) para recoger una pelota y no volvió a salir. Los servicios de emergencia lo están buscando, pero se temen lo peor.
La búsqueda empezó a las ocho de la mañana y se prolongó durante todo el día. En el dispositivo participan los submarinistas, el grupo de actuaciones especiales y dotaciones marítimas y terrestres. Lo buscan en el lugar donde lo vieron por última vez, en una isla cercana al embalse.
Los testigos aseguran que el joven se lanzó al agua para recoger una pelota y que no lo vieron salir. Las tareas de rescate se han alargando por la mala visibilidad debajo del agua. Se trata de una profundidad entre 12 y 14 metros con una temperatura del agua de 10 grados.
Es el segundo accidente grave en un pantano en pocos días. La semana pasada encontraron sin vida a Clara, la niña de 9 años que había desaparecido en una embarcación. Las tareas de rastreo también se prolongaron durante días, debido a la mala visibilidad.