El jugador francés del Bayern de Múnich, Lucas Hernández, tendrá que entrar en prisión de forma inmediata. Así lo ha ordenado el Juzgado de lo Penal número 32 de Madrid, que lo acusa de quebrantar una orden de alejamiento. Los hechos se remontan a su época como jugador del Atlético de Madrid.
La justicia española emitió el pasado 14 de septiembre una diligencia donde se le insta a ingresar voluntariamente en prisión:. “Se cita a don Lucas François Bernard Hernández para que comparezca en este juzgado el próximo 19 de octubre, a fin de ser requerido para que en el plazo de diez días ingrese voluntariamente en el centro penitenciario de su elección”.
El origen de la condena
Todo nace de los hechos ocurridos el 3 de febrero de 2010, cuando el entonces jugador del Atlético de Madrid cometió un delito de maltrato sobre su mujer. El episodio de “maltrato en el ámbito familiar” tuvo lugar en plena calle. Un juzgado le condenó a él y a su esposa, Amelia de la Osa Lorente.
Ambos fueron condenados a 31 días de trabajos comunitarios y el juez les impuso una orden de alejamiento. La pareja no podía verse ni comunicarse por cualquier medio durante un período de seis meses. Sin embargo, la orden fue quebrantada y ambos decidieron irse de luna miel.
De regreso a España, el 9 de junio, fueron identificados en el aeropuerto Adolfo Suárez de Madrid (Barajas) y Lucas Hernández quedó arrestado. Él fue puesto a disposición judicial en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer número 3 de Madrid, y a continuación fue puesto en libertad. A ella solo la identificaron, ya que el juzgado no había notificado la orden.
Un año de cárcel para Lucas
La Fiscalía solicitó un año de cárcel para el futbolista, al entender que había incumplido la orden de alejamiento. El Juzgado de lo Penal número 35 de Madrid le condenó a un año. Sus abogados solicitaron la suspensión de la pena, o su sustitución por trabajos comunitarios, pero su demanda no fue escuchada.
Lucas Hernández ya había incumplido anteriormente los días de trabajo impuestos en la primera sentencia. El juez alegó la reincidencia como motivo para decretar la prisión para el acusado. Ahora, la justicia ha requerido su presencia voluntaria para cumplir la pena.
Conviene aclarar que Lucas Hernández no irá a la cárcel por el incidente ocurrido en 2010, sino por incumplir la orden de un juez. Por lo tanto, en esta ocasión es la administración de justicia española la que va contra el jugador. Su mujer ha salido indemne del suceso.
Pendiente del recurso de apelación
Mientras, la defensa del jugador ha presentado un recurso de apelación que la Audiencia Provincial tendrá que evaluar y valorar. Mientras se acepta o se rechaza el recurso, Lucas tiene que presentarse en Madrid como muy tarde el día 19 de octubre. En un plazo de diez días deberá escoger el centro penitenciario donde ingresará.
El jugador tendrá que entrar en la cárcel sí o sí, ya que la decisión está tomada. La única salvación para él es que la Audiencia Provincial acepte el recurso y determine que no debe entrar en prisión. También es posible que entre en la cárcel, y sea puesto en libertad al cabo de pocos días.
La ley en España dice que una persona que ha denegado una medida alternativa al ingreso de prisión, debe entrar en la cárcel. En caso de que el recurso sea aceptado, entonces puede salir de la cárcel.