La localidad de Alcalá la Real, en la provincia de Jaén se encuentra consternada después de que este viernes se produjera el trágico fallecimiento de Francisco Zúñiga, de 52 años, el sacristán de una de las iglesias del municipio. Este perdió la vida este 26 de febrero por la tarde después de recibir varias puñaladas por parte de un hombre que le atacó a las puertas del templo.
El suceso tuvo lugar sobre las 20.20 horas de este viernes. Fue entonces cuando se dio el aviso a los servicios de emergencias del 112 de la Junta de Andalucía. En la llamada se informaba de que había un hombre a las puertas de la Iglesia de la Consolación de la localidad jiennense con heridas de gravedad después de haber recibido varias puñaladas
Desde el número de emergencias, rápidamente se activaron a los diferentes efectivos de emergencias. Al lugar de los hechos se desplazaron tanto miembros de los servicios sanitarios de la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, como agentes de la Guardia Civil como de la Policía Local.
No tardaron mucho tiempo en llegar a la calle real, donde está situada la iglesia. Una vez allí, el equipo sanitario pudo confirmar la gravedad de las heridas que presentaba Francisco Zúñiga. Pese a sus intentos por reanimarle, no se pudo hacer nada por su vida y el sacristán acabó falleciendo justo delante de la iglesia a la que había servido durante años.
Era muy querido por su comunidad
Horas después del ataque, la Guardia Civil confirmaba que el autor de las puñaladas que le costarían la vida a Francisco Zúñiga había sido detenido. El sacristán era muy conocido en la localidad además de muy querido por los años que llevaba ejerciendo su función religiosa.
El hermano de Francisco ha querido agradecer todos los hermanos de cariño que han recibido tras conocerse la triste noticia. Ha destacado que «era una excelente persona» y ha pedido que recen por él y que «no se concentren en momentos tan difíciles y de enorme riesgo sanitario para evitar cualquier concentración que ponga en riesgo a más personas».
Y es que había surgido en redes sociales una iniciativa para hacer una concentración en recuerdo de Francisco. Pero esta también se quería convocar para mostrar su repulsa al crimen, aunque está estaba cogiendo ciertos aires racistas después que en las mismas redes se difundieran rumores de que el autor de los hechos sería un inmigrante sin hogar.
El ayuntamiento ha pedido calma a sus vecinos
Todos los grupos políticos municipales se pusieron de acuerdo para condenar los hechos y declarar un día de luto en Alcalá la Real, durante el que todas las banderas ondearán a media hasta. Pero, además de esto el alcalde, Marino Aguilera, quiso hacer un llamamiento a la calma: «Son momentos difíciles y de lógica indignación, pero el presunto asesino ya ha sido detenido y debemos dejar que la Justicia siga su curso. Rogamos que Alcalá siga siendo el municipio tranquilo que todos conocemos».
El ayuntamiento también había pedido que se evitarán concentraciones y que se siguiera el minuto de silencio convocado para este sábado a las 12 desde los balcones. «Que cesen los mensajes de odio que circulan por las redes. El odio no arreglará nada, dejemos que actúe la Justicia. En honor a Paco. Nuestro más sentido pésame a familiares y amigos. Siempre en nuestro recuerdo», pedía el alcalde.
También han querido lamentar el fallecimiento de Francisco desde la Diócesis de Jaén. En nombre también del obispo, Amadeo Rodríguez Maro, han mostrado «su profundo dolor y consternación ante el trágico suceso que le ha costado la vida a Francisco José Zúñiga».