El pasado viernes, durante una conferencia en Barcelona, Pedro Sánchez anunció a bombo y platillo el fin de la mascarilla obligatoria en exteriores. El presidente expuso la fecha del 26 de junio, el próximo sábado, como el día en que este elemento de protección contra el coronavirus dejaría de ser prescriptivo al aire libre. Desde entonces, toda España espera con ganas la llegada del sábado para poder salir a la calle sin la mascarilla, obligatoria desde el pasado verano.
Fue el 9 de julio de 2020 cuando Cataluña impuso la obligatoriedad de este elemento en exteriores. En pocos días, el resto de regiones de España fueron sumándose a esta normativa, que en cuestión de semanas fue recogida por una orden estatal. La regla se ha mantenido vigente durante los últimos meses y Sánchez anunció que un Consejo de Ministros extraordinario va a derogarla a partir del próximo sábado 26.
España, pendiente de la evolución de la variante Delta en países vecinos
Pero cuidado, porque aún faltan cinco días para el sábado y las circunstancias podrían cambiar. De hecho, las últimas noticias abren la puerta a poner el freno al anuncio que el viernes hizo Pedro Sánchez. Aunque nadie habla abiertamente de una posible marcha atrás, lo cierto es que en los últimos días han crecido las dudas al respecto.
Los expertos advierten de que levantar la obligatoriedad de la mascarilla en espacios al aire libre podría suponer un riesgo añadido para la variante india. La cepa Delta —así se denomina científicamente la variante procedente de India—, muy contagiosa, amenaza a Europa y en el Reino Unido ya se ha frenado la desescalada. Ahora, es nuestro país vecino, Portugal, quien hace sembrar las dudas a las autoridades sanitarias españolas.
La variante Delta es la culpable del cierre perimetral que se ha impuesto a la ciudad de Lisboa y a todo el valle del Tajo. Y en las mentes de los expertos españoles debe sonar aquel conocido refrán: «Cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar». Si Portugal ya actúa contra la variante india, ¿qué debería hacer España? ¿Es adecuado levantar la obligatoriedad de la mascarilla en exteriores?
Estas son las cuestiones que se formulan los expertos en nuestro país y que abren la puerta a que se 'retoque' la medida anunciada para el próximo sábado. Desde el Ministerio de Sanidad se reconoce la existencia de un 1% de la variante india en España, pero son muchas las voces que apuntan a la irrealidad de este dato. El hecho de que en el norte de Portugal la prevalencia de Delta sea del 15% hace pensar que, por ejemplo, en Galicia su presencia debe ser mayor al 1%.
Dudas sobre si hay que levantar la restricción de la mascarilla al aire libre
Es en este contexto en el que hay que situar las dudas de los expertos sobre el levantamiento de las mascarillas en espacios exteriores. En países como Alemania, la variante india ha duplicado su prevalencia en tan solo dos semanas. En base a ello, creen que en nuestro país también es cuestión de semanas que la variante Delta se convierta en predominante.
Ante estas circunstancias, y en vistas al hecho de que en Reino Unido, con la vacunación muy adelantada, se haya postergado un mes la desescalada, España tiene dudas. Entre este mismo lunes y el próximo jueves, cuando debe tomarse la decisión, los expertos van a valorar si, efectivamente, se da cumplimiento a la promesa de Sánchez.
Una de las opciones es, efectivamente, levantar la obligatoriedad de la mascarilla en exteriores pero matizar esta apertura, obligando a llevarla en algunos supuestos. En cualquier caso, saldremos de dudas a finales de semana mientras mantenemos parte de nuestra mirada puesta sobre la variante india y su potencial peligro.