Estudios recientes han comprobado, mediante una simulación informática, que un inodoro con descarga de agua puede crear una nube de gotas con virus lo bastante grande y duradera en el tiempo como para que otras personas puedan respirarlas.
Según la publicación de la revista 'Physics of Fluids', los investigadores utilizaron modelos informáticos para simular los flujos de agua y aire en un inodoro y la nube de gotas resultante. Gracias a las ecuaciones de Navier-Stokes, hicieron una simulación de la descarga en dos clases de inodoros: uno con una sola entrada para descargar agua y otro con dos entradas para crear un flujo rotativo.
Investigadores de la Universidad de Yangzhou han realizado el concluyente estudio
Además, en el estudio establecieron un modelo para simular el movimiento de miles de gotas pequeñas expulsadas de la taza del inodoro al exterior. En los últimos tiempos se utilizó un modelo parecido para simular el movimiento de las gotas de aerosol expulsadas durante una tos de una persona.
Los resultados de la investigación fueron realmente sorprendentes. Cuando el agua cae en la taza del inodoro por un lado, impacta el lado contrario, creando vórtices. Dichos vórtices siguen hacia arriba en el aire trasladando las gotas a una altura cercana al metro, donde pueden inhalarse o adherirse a las superficies. Estas gotas se quedan en el aire más de un minuto.
«Uno puede prever que la velocidad será aún mayor cuando un inodoro se usa con frecuencia, como en el caso de un inodoro familiar durante un tiempo ocupado o un inodoro público que sirve a un área densamente poblada», apunta el coautor Ji-Xiang Wang, de la Universidad de Yangzhou en China.
En Estados Unidos existen baños sin tapas con el riesgo que conlleva
Casi el 60% de las partículas expulsadas ascienden por encima del asiento en un inodoro con dos puertos de entrada. Para evitar el contagio es necesario cerrar la tapa antes de descargar el agua, ya que esto debería reducir la propagación de aerosoles. Pero, en muchos países, como Estados Unidos, los inodoros en los baños públicos a menudo no tienen tapas y según los expertos esto genera un grave peligro para la salud de las personas.