Este lunes se cumple una semana desde que el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, anunció por sorpresa que abandonará la vicepresidencia segunda del Gobierno en las próximas semanas. En una decisión completamente inesperada, Iglesias hizo público que deja el Gobierno y propuso a la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no tan solo como relevo en la vicepresidencia del ejecutivo, sino también como futura candidata de Unidas Podemos en las próximas elecciones generales. Iglesias anunciaba así implícitamente que se retira de la política a escala estatal, como mínimo, por el momento.
A la vez, Iglesias anunciaba que sería el candidato de Unidas Podemos a la presidencia de la Comunidad de Madrid el próximo 4 de mayo, lanzándose así a la política autonómica y jugándose el futuro de su carrera con una decisión muy arriesgada: disputarle la victoria a Isabel Díaz Ayuso y postularse para ocupar la Real Casa de Correos. Queda algo menos de un mes y medio para la celebración de los comicios, cuya campaña electoral va a dar arranque oficial el próximo domingo, 18 de abril. Pero la proximidad de la fecha pone a Madrid ya en una situación de intensa precampaña y en los próximos días, Iglesias va a estar en el centro del foco mediático para explicar su proyecto.
¿Un futuro negro para Iglesias?
Por ahora, las encuestas publicadas sobre las elecciones madrileñas auguran un mal futuro para Pablo Iglesias. Si tomamos en consideración los sondeos hechos públicos durante la semana pasada, Isabel Díaz Ayuso sería la clara vencedora de las elecciones. El PP obtendría, de promedio, el 38% de los sufragios, en una victoria inapelable. A mes y medio de las elecciones, el reto de los populares madrileños es ir a por la mayoría absoluta, que daría a Díaz Ayuso la estabilidad de la que no ha gozado en la legislatura disuelta hace unos días.
Desde las elecciones de 2011, que dieron paso al último año de presidencia de Esperanza Aguirre y a los tres de Ignacio González, el PP no tiene la mayoría absoluta de la Asamblea de Madrid y ese es el objetivo que persigue ahora Díaz Ayuso. En todo caso, el promedio del 38% le augura ya una victoria cómoda, muy lejos de un PSOE al que se atribuye un 24% de la estimación de voto. Cabe recordar que Ángel Gabilondo, que repite ahora como candidato, fue el ganador de los comicios en la Comunidad de Madrid el pasado 2019.
Vox y Más Madrid se disputarían, según las encuestas, la tercera plaza: el promedio de resultados de los sondeos publicados hasta hoy les sitúan alrededor del 11% en estimación de voto; mientras que C's batalla por no quedar fuera de la Asamblea de Madrid. Hoy por hoy, la media de las encuestas les deja en el 4%, por debajo del 5% necesario para obtener representación parlamentaria en la cámara regional. Y en todo este panorama político, ¿cuál es el encaje concreto de Unidas Podemos? En la primera semana tras anunciar que será candidato, Pablo Iglesias consigue un crecimiento para su partido, que hasta entonces se auguraba que tendría dificultades para superar la barrera del 5%.
Un mes y medio para revertir la situación
Ahora, Unidas Podemos sería la quinta fuerza del Parlamento madrileño, con aproximadamente el 9% de los votos. Tendencia al crecimiento, sí, pero insuficiente para Pablo Iglesias: a un mes y medio de los comicios, si se cumplieran estos resultados, el aún vicepresidente segundo del Gobierno se vería forzado a dimitir y a poner punto y final a su trayectoria política. El movimiento de Iglesias fue muy arriesgado: el líder de Unidas Podemos decidió apostarlo todo a un buen resultado electoral en Madrid. Aunque el objetivo público es derrotar a Díaz Ayuso, Unidas Podemos es consciente de que el reto es imposible.
Pero hay un segundo objetivo: que Unidas Podemos se convierta en la fuerza que encabece el bloque de izquierdas en Madrid. Imponerse al PSOE y a Más Madrid sería un resultado muy exitoso para Iglesias, si bien se antoja complicado: cierto es que le pisa los talones a Más Madrid —a una distancia de dos puntos porcentuales—, pero el PSOE queda todavía muy lejos de Iglesias, a quince puntos porcentuales en la media de estimación de voto. En seis semanas, esta parece una situación muy compleja de revertir, pero este va a ser el principal objetivo del líder de Unidas Podemos.
Datos en mano, lo cierto es que hoy por hoy las encuestas dejan claro el futuro negro de Pablo Iglesias. Si Unidas Podemos obtuviera unos resultados como los que pronostican hoy todos los estudios demoscópicos, Iglesias no tendría más remedio que abandonar la política tras perder su arriesgada apuesta a una carta. Habrá que estar atentos durante las próximas semanas a cuál es la tendencia que siguen los morados, así como la evolución de Más Madrid y del PSOE en los sondeos para calibrar en qué medida Iglesias puede conseguir un resultado que le refuerce a él y a Unidas Podemos; y por lo tanto qué opciones tiene para revertir lo que ahora parece claro: el 4 de mayo podría ser el último día de Pablo Iglesias en política.